Presidente, tengo una carta para usted

El Presidente del Gobierno tuvo que enfrentarse ayer al juicio de los ciudadanos.

Cuando Aznar nos abandonó a todos los españoles e insonorizó la Moncloa para no tener que escuchar el 'No a la Guerra'; cuando Aznar y sus secuaces intentó manipularnos a todos tras los ataques del 11-M pensando en las urnas; cuando todo aquéllo aconteció llegó José Luís Rodríguez Zapatero. Él fue, no lo olvido, el que nos tendió una mano nueva y una forma de entender la política basada en el talante y en el sentido común. Y que nadie justifique su victoria electoral a conjeturas raras porque, 4 años después, volvió a ser elegido, sin ninguna conjetura añadida.

Ahora, en tiempos donde las cosas van mal y se sabe por qué van mal; ahora que nos apretamos el cinturón por un proceso de globalización que sabíamos tendría que romperse en pedazos en algún momento; ahora es cuando nosotros tenemos que unirnos y cumplir con el grado de responsabilidad y confianza que todo Gobierno necesita para salir de una situación tan delicada como la nuestra. Ahora es el momento de que nosotros demos la cara.

El Gobierno tiene que actuar para paliar lo máximo posible las consecuencias de la crisis; y sabiendo que no exiten varitas mágicas con las que cambiar la situación de la noche a la mañana nosotros, los ciudadanos, tenemos que cumplir con nuestra responsabilidad y confianza. Y si pasado el tiempo no caminamos hacia delante, tendremos unas urnas donde castigar a José Luís Rodríguez Zapatero por no haber sabido arreglar la situación. Pero, hasta ése momento, tenemos que cumplir.

Tengo 26 años; soy estudiante y el panorama laboral y social no se me antoja positivo. Todo lo contrario. Pero para exigir en las próximas elecciones generales y repartir culpas o atribuir méritos, voy a cumplir con mi compromiso de ciudadano. Voy a confiar en mi Gobierno y voy participiar actívamente en fomentar un clima positivo que genere una confianza de la que puedo beneficiarme. Si el plan falla tendré la oportunidad de 'castigar' al Presidente en las urnas, que es donde se quitan y se ponen a los gobernantes del país.

Hasta entonces y de momento, cuente conmigo Presidente. Ahora bien, no se duerma y cumpla usted también porque puedo mudarle de La Moncloa. "Vamos a salir de esta" es su frase y la mía. ¿Es la tuya?