Virginia: I'll stand by you

Virginia no necesita ganar OT: ella ha triunfado protagonizando algunas de las mejores actuaciones que se han visto nunca en el programa karaoke estrella de la televisión.

Virginia Maestro

Mi lastfm está que echa humo con Virginia: casi 400 reproducciones en una semana. Como comprenderán, esto no se debe a que Carrie haya sido la marginada de la academia o a que sus compañeros hayan volcado en ella todas sus frustaciones. Se debe, principalmente y dejando a un lado su indudable atractivo físico, a esa cosas que hace con la voz. Yo lo llamo "modulaciones" pero no soy Coco Comín así que lo mismo estoy empleando el término de forma errónea. Espero me perdonen por ello, pero la poliédrica de Cocó (según como se la mire es la hermana gemela de Mercedes Sampietro o la tía de informe semanal) soltó en la última gala que Virginia "alteraba la frecuencia del sonido" y aquí nadie dijo nada así que no sé por qué voy a tener yo que andarme con cuidado a la hora de invertarme los términos musicales. Para más inri, y siguiendo con "alteración frecuencial del sonido", Virgnia asintió, de forma encantadora todo sea dicho, a la afirmación de Cocó. "Sí, sí... es verdad, me alegro que lo hayas notado" parecía decir.

Volviendo a mi - que al fin y al cabo es lo que importa - por si los resultados del lastfm les parecen poco, les confesaré que mandé dos sms para que Carrie cruzara la pasarela. La primera vez en mi vida que me he gastado el dinero en una cosa de estas. Y lo hice no por la boutade que ello supone sino porque me parece que lo que esta niña hace en el escenario es un ataque frontal a los males endémicos que venimos sufriendo desde hace unos años. A saber: canta mejor el que más chilla, transmites mogollón cuando cierras los puños y los elevas levemente a la altura de la cara, Celine Dion y Withney Houston son las putas amas porque cantan muy bien, el gracejo andaluz es tendencia y si no eres simpático es que eres un chungo, personalidad cero equivale a cercanía con el público, etc. Pues no, joder, no. Se agradece que alguien decida cantar Creep (y eso que odio a Radiohead con todas mis fuerzas), a Nina Simone, Nat King Cole, los Cardigans y no intente subir 15 tonos el tema para lucirse y demostrar, como decía el exterminable de Ivan que "yo también canto, sabes?". Se aprecia también que cuando la gente te aburre te vayas a leer un libro, que no te lleves bien con todo el mundo, que seas pelín antisocial y que gracias a tu encanto personal te granjees las envidias de todos tus compañeros. Se agredece y mucho además.

Que Virginia gane o no el concurso es algo totalmente anecdótico. Me duele decirlo pero en el fondo deseo que no grabe ningún disco y se dedique a cantar versiones por recintos de aforo recogido donde la discografica, o el productor de mierda de turno, no pueda meter mano para estropear lo que Carrie ha conseguido: llevar un poco de buen gusto prácticamente todas las semanas a nuestros salones.