Corbacho tilda de "valiente" la segregación de inmigrantes fuera de la red escolar

El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, tildó ayer de "valiente" la iniciativa de la Generalitat de Cataluña de segregar temporalmente, de manera previa a su escolarización, a los menores inmigrantes de 8 a 18 años, para facilitar su integración. Corbacho, que partició en Barcelona en la celebración del treinta aniversario del PSC, aplaudió la estrategia adoptada por el conseller de Educación, Ernest Maragall, para hacer de la escuela un proyecto "de éxito".

"Una vez más, Cataluña es valiente para dar respuesta" a la realidad de la inmigración, ha señalado Corbacho, que ha felicitado públicamente a Maragall por esta iniciativa. Lo que pretende la Generalitat es que los menores inmigrantes que lleguen a Cataluña de zonas con culturas distintas a la europea, como los africanos, no entren directamente en un centro escolar, sino en espacios creados para atender las necesidades específicas de estos escolares.

En estos espacios, que se pondrán en marcha de manera pionera en Vic (Barcelona) y Reus (Tarragona), los niños realizarán actividades cuatro horas por la mañana, hasta que estén mínimamente preparados para acceder a un centro educativo ordinario. El departamento de Educación, que ha diseñado estos espacios con la colaboración de los ayuntamientos, apuntó que esta iniciativa mejorará la detección de las necesidades específicas de los futuros alumnos.

El proceso que seguirán los inmigrantes que lleguen a Vic y Reus tendrá las mismas fases: recepción de las familias inmigrantes en el espacio de acogida por parte de los ayuntamientos y puesta en contacto posterior con los EBE, donde se evaluarán las necesidades de los menores y se informará a los padres de las posibilidades de su entorno y de las ayudas que existen. Cuando se considere oportuno, los menores serán distribuidos en los centros escolares ordinarios y se informará a las escuelas sobre las características de éstos y sus necesidades.

En el caso de los niños de 0 a 8 años, la Generalitat les derivará directamente a un centro escolar tras redactar un informe, mientras que se han previsto programas específicos de acceso al mundo laboral para los adolescentes de entre 16 y 18 años. Los niños y adolescentes de 8 a 16 años llevarán a cabo en los EBE actividades y talleres de conocimiento del entorno y la realidad educativa, social y cultural del municipio durante las cuatro horas que estén en el centro, mientras que se incentivará su participación en iniciativa sociales, deportivas y culturales del barrio.

Los profesionales que trabajarán en estos espacios elaborarán un informe sobre la situación académica del menor y sus competencias en ámbitos como las matemáticas y la lengua, documento que también recogerá cómo el alumno vive el proceso migratorio. Cuatro profesionales (un maestro, un educador social, un monitor en asuntos de ocio y un integrador social) se harán cargo de estos espacios que, además de contar con una zona para patio, estarán dotados con equipamiento y mobiliario escolar, audiovisual e informático.

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