Francia: la primera decepción

Los franceses ya se han presentado en la Eurocopa, y si este es el fútbol que tienen que ofrecer que se vayan o que no hubieran venido. Después de las buenas sensaciones que había dejado el torneo hasta el momento, llegó Francia y Rumanía y pusieron el primer empate a cero.

Tostón soberano el que se ha podido ver hoy en el Letzigrund Stadion. Lo esperábamos de Rumanía, con poco nombre y pocos recursos, pero la gran Francia, esa campeona venida a menos, ha dado una imagen pobre y poco digna del fútbol europeo de élite que se le presume.

Ribery ha sido el único que ha intententado algo, en la primera parte, con alguna jugada esporádica y algún destello de calidad, pero el resto sencillamente no ha estado. Ni el esperado Benzema, ni el resucitado Anelka han aparecido en todo el partido.

Pero cuando un equipo no tiene nada, y este es el caso, siempre puede usar el recurso del coraje y de la casta, de la entrega. La camiseta que ha vestido a Zidane y la subcampeona del mundo merece, cuando menos, eso. Y no ha sido así, todo lo contrario. Francia no ha presionado nunca en todo el partido. Esperaba a los rumanos en su campo absolutamente encerrados, y tampoco es que el juego de los rumanos inquietara mucho. Algún tímido saque de falta del jugador del Inter de Milán Chivu.

No puedes venir a una Eurocopa y hacer tu primer partido de esta manera y sobre todo, con esta actitud. Y la culpa la tiene un hombre: Domenech. Con 0-0 en el marcador y en el minuto 70 hizo su primer cambio: retiró a N. Anelka; y en el minuto 80 igualmente quitó a Benzema. Sus dos piezas claves, sus dos referentes de ataque, fuera del partido con un pobre empate a cero en el marcador. Cualquier entrenador con algo de vergüenza se le hubiera visto en la banda desesperado, cabreado. Él ni ha parpadeado. El resto con los brazos en jarra y esperando a que Mejuto González (árbitro del partido) pitara el final del encuentro.

Le llamaban, algunos, el grupo de la muerte, pero lo que no sabían que ese calificativo nada tenía que ver con el peligro de sus selecciones, sino por el aburrimiento de su juego. Muchos se llenaron la boca con Francia y con Italia, y no tuvieron en cuenta a Holanda. Veremos a ver quién pasa. Desde luego, con lo que hemos podido ver esta tarde, que Francia se vuelva con su Tour y vigile su Torre Eiffel, que no es digna de lo que sí hemos podido ver en equipos como Suiza o Austria, muy inferiores a priori a los franceses.

Por fin he visto a una selección a la que España puede ganar. Esta vez no me vale el argumento de "los franceses siempre estarán ahí". No les va a valer. Debería existir la posibilidad de enviar sms para echar a una Selección por deseo expreso del público, que al fin y al cabo es el que se traga bodrios como este. Suspenso para Francia.

Carlos F: