Renfe: una compañía de "primera"

 A partir de la segunda quincena de junio, el trayecto ferroviario Madrid-Barcelona sólo podrá hacerse con traje y corbata. Se suprimen los servicios "normales" y se imponen los de alta calidad. El AVE será el único tren que una ambas ciudades. Y el que no pueda pagar: en autobus.

Renfe lucha por convertirse en la empresa del futuro, pero sus armas y sus estrategias comerciales son de tiempos pasados. En lugar de promocionar el AVE lucha por imponerlo. Lo normal, ante la emergencia de nuevos productos, suelen ser promociones de descuento que atraigan al consumidor para que este decida, libremente, escoger uno u otro.

Esta empresa ha decidido que la mejor forma de introducir el AVE a los españoles es imponiéndolo.Suprimiendo el resto de líneas regulares, el viajero tendrá que pagar más de 100 euros para viajar a Barcelona o a Madrid. Antes se podía hacer por menos de 40 euros.

El AVE es de todos los ciudadanos españoles, que estamos pagando cada una de las infraestructuras que se están acometiendo en todo el país. Nuestros impuestos y nuestras tasas van a las arcas públicas, y desde estas se envían a Renfe para que el tren de alta velocidad sea posible. Y sin embargo, ante esta aportación, se nos retribuye prohibiéndonos viajar en clase turista. De esta forma el AVE no amplía posibilidades, las restringe.

Mientras el dinero se envía a espuertas para crear una red ferroviaria moderna, hay sitios que siguen incomunicados. No hay trenes Murcia-Almería. Existe un "Cercanías" entre Madrid-Linares. Los Regionales apestan a asientos podridos de vejez y en las estaciones no hay quien escuche la megafonía.

De nada sirve tener trenes de primera circulando por España si el servicio y la empresa son de segunda.

Se supone que las nuevas tecnologías deberían abaratar los servicios. Más si cabe en el tema del transporte, con tanto cambio climático y con tanta subida de los carburantes. Se pide el uso del transporte público pero no se facilita el acceso al mismo.

Según reza el lema de Renfe: "el tren y tú"; el problema es que siguen sin contar contigo, conmigo... con nosotros, los que lo hacemos posible.

Carlos F.