4 meses, 3 semanas y 2 días  

Crítica de la película ganadora de la Palma de Oro en Cannes, "Cuatro meses, tres semanas y dos días"

Hace tiempo que estoy buscando una película que me emocione... la verdad es que voy bastante al cine, pero últimamente hay una falta de química entre las películas y un servidor... fui a ver "Once" y me sentí engañado por todos lo que la encumbraban como la nueva joya "indie", después "Viaje a Darjeling" y más de lo mismo: estéticamente impecable pero el contenido y el ritmo parecidos al de las otras pelis de Wes Anderson, regular. Más tarde le tocó el turno a "Expiación", una buena peli con grandes momentos pero tampoco me emocionó, con "Los Crímenes de Oxford" tampoco esperaba mucho, y al final resultó ser una peli entretenida pero poco más, luego llegó "American Gangster", y aunque en algunos momentos me flipó se quedaba en una peli de mafia más... así que al final le hice caso a mi compañera y fui a ver una peli cultureta: "Cuatro semanas, tres meses y dos días".

Tengo que reconocer que me costó mucho coger el valor para ir a ver una peli donde dos chicas iban a mantener largas conversaciones y diatrivas (en rumano!!!) sobre el aborto, hasta llegar a los 113 minutos de metrage que se anunciaba en las reseñas... Pero después de un par de fracasos en mis elecciones cedí y me dirigí a los siempre rabiosos Cines Verdi (¿habrá una mayor concentración de pedanteria y "gafapasta" en toda Barcelona?). Lo primero que hay que tener en cuenta es que yo desconocía la exitosa trayectoria de esta película, no sabía nada de la Palma de Oro, el Premio Fipresci en Donosti ni los premios de la Acvademia de Cine Europeo... esto no lo digo para publicitar mi incultura, sinó porque después he leído que muchos espectadores abrumandos por tanta colección de premios se sintieron decepcinados al visionar el film... pues a mi me sucedió lo contrario: Me encantó! Supongo que todo depende de las expectativas de uno, y como yo pensaba que sería un peñazo de película de mujeres y en rumano, entré a la sala asustado y salí satisfecho.

En fin, vamos a la peli en si... como ya debéis saber se trata de la historia de una chica rumana que decide abortar. La película está explicada des del punto de vista de su compañerra de cuarto en la residencia de estudiantes y está situada en 1987, durante los últimos años del comunismo en los países del este. Así pues, por un lado nos relatan de una manera escalofriante la doble moral de esa sociedad y todos los trapicheos que se tenían que hacer para sobrevivir, constantes sobornos, trueques y mentiras. Por otro lado tenemos la historia más humana de las chicas, la dificultad de abortar en esa sociedad tan opresora y prohibicionista provoca que se tenga que realizar toda la acción bajo el secreto más absoluto y que después se vean obligadas a humillarse para que el "médico abortista" les realice el aborto. Los miedos de las chicas, las contradicciones de la juventud y todo el drama humano que supone este hecho dentro de una sociedad tan cerrada de mente. Cuando salí del cine, leí que la historia se basaba en un hecho real que el director conocía de primera mano, y la verdad es que esto se nota en la construcción excelente de los personajes que, sumado a las maravillosas interpretaciones de las dos protagonistas, provoca que en algún momento tome un cariz casi documental.

Por otro lado tenemos la cuestión estilística. Por mucho que haya leído alguna rajada por ahí, la verdad es que a mi me encantó. Hacia tiempo que no veía unos planos fijos taaaaaaaaan largos, a veces parecía una película más próxima a la tradición asiática contemplativa que al cine europeo o americano, mucho más proclive al rápido intercambio de planos. De hecho hay un plano que llega a durar 12 minutos!!! Pero bueno, la verdad es que estos planos no cansan en absoluto, los personajes se mueven en ellos haciendo que la decisión de mantener la cámara fija se entienda hasta el punto que es imposible imaginar la peli hecha de otra forma. Personalmente me fliparon un par de planos: por un lado la cena en casa de los suegros, donde los brillantes diálogos se entremezclan con la imagen de la chica, el novio, los padres de él, 4 amigos de los padres y algunos más fuera de plano, creando un ambiente claustrofóbico que te deja completamente absorto. Por otro lado hay un par de momentos en el baño del hotel donde este uso de la cámara augmenta la carga dramática de lo que está sucediendo de una forma escalofriante.

Mención a parte merece el final, con otro plano eterno al que tampoco voy a entrar pero que te deja unos segundos paralizado y fuera de lugar. Según he leído está mucho más cargado de significado y moralina de lo que en un principio podía imaginar, ya que según parece solo lo pueden comprender la gente que conozca la realidad rumana sobre el tema del aborto. Eso sí, pediría que los dueños de los cines no tengan tanta prisa en abrir las luces, y nos dejen a oscuras un rato más, porque la verdad es destrozan la conexión que se crea entre personajes y espectadores de una manera muy brusca. Lo que si fui incapaz de entender es poruqe el director había escogido esa música para los créditos finales... des de mi punto de vista está completamente fuera de lugar!