Son todos iguales

Los principales políticos españoles pueden discutir por cualquier cosa, pero parece que tienen los mismos gustos literarios.

Esto iba a ser una entrada meramente literaria, una cita de uno de esos libros raros que sólo me apetece leer a mí, pero posiblemente acabe como un artículo político de primer orden. Veamos:

Thomas de Quincey, escritor inglés del siglo XVIII ("¡ksfi-i-i!", que dirían Les Luthiers) es conocido (aparte de los elogios que Borges hace de él) por dos obras, Confesiones de un inglés comedor de opio y Del Asesinato considerado como una de las Bellas Artes. Cualquiera de los dos títulos basta para que el bibliotecario ponga cara rara, pero opté por el segundo, que en la edición de Austral del 66, toma ya, incluye otra obrita, El coche correo inglés. Es aquí donde aparece esta nota al pie, totalmente borgiana:

(1) La Islandia de Von Troil: Alusión a un conocido capítulo de la obra de Von Troil titulada Respecto a las serpientes de Islandia. Todo el capítulo se reduce a estas cinco palabras: "No hay serpientes en Islandia".

Resulta divertido comprobar, gracias a Bubastis, que el libro existe realmente. Pero más divertido resulta encontrar a gente que, como yo, haya encontrado la cita graciosa ¿a que no saben quién ha leído a De Quincey? Ni más ni menos que Mariano Rajoy. Copio y pego la cita de El Confidencial:

"También añadió que el paradigma del estilo del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero es la vivienda, que se ha encarecido un 33,33% en dos años. Al presidente del PP la gestión en esta área le recordaba un capítulo de un libro de Uno Von Troil sobre la exploración en Islandia, titulado Respecto a las serpientes. El contenido de ese capítulo se resumía en cinco palabras: “No hay serpientes en Islandia".

Ese ejemplo le sirvió para denunciar con otras cinco palabras que el Ejecutivo “no tiene política de vivienda” y que este ministerio es “el más pintoresco” de todos."

Como la noticia es antigua, la orientación de las críticas puede haber cambiado (ahora unos y otros dirán que la vivienda tal o que la Bolsa cual). Pero rizando el rizo, uno se pregunta ¿habrá leído Zapatero El coche correo inglés? Sospecho que sí, porque el presidente es un ávido lector de Borges. Como demostración, sirva el prólogo que escribió en 2001 para el volumen de Ficciones, publicado en la colección "Las 100 mejores novelas en castellano del siglo XX" de, pásmense, el diario El Mundo. Un trocito al azar:

"Quizás, entre las cosas admirables de Borges, la que más me impresina es su extraña mezcla de pasión y escepticismo, esa mezcla de la que en distinta proporción y cantidad estamos hechos los seres humanos, pero que en el caso de nuestro autor se da en un equilibrio y abundancia cuya mejor prueba es su obra.

[...] Prologar a Borges resulta muy difícil cuando Borges es el prólogo de uno mismo, y es eso exactamente lo que le ocurre a este prologuista. Quizás la tarea que se propuso Pierre Menard al tratar de escribir el Quijote no sea tan extraña, uno se ve muchas veces haciendo cosas parecidas a la que intentó Menard, como ocurre ahora."

Las interpretaciones político futurísticas de este fragmento se las dejo a ustedes. Yo por mi parte, tengo una conclusión: son todos iguales.