Daimiel (Ciudad Real).- El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha asegurado hoy que su Gobierno no utilizará agua del Tajo medio para recuperar el Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel.
Barreda, que ha estado hoy en Daimiel (Ciudad Real) junto al secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, en el acto de compra-venta por parte del ministerio de nueve fincas del entorno del parque nacional, ha añadido que la opción de trasvasar agua desde el Tajo medio es "inasumible" para Castilla-La Mancha.
El presidente regional ha señalado que no hay que hacer cábalas con alternativas que carecen de fundamento, pues ante la situación de Las Tablas de Daimiel no se puede improvisar en cada momento.
Además, ha descartado la opción de llevar agua al Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel desde el pantano de Peñarroya, situado aguas abajo del Parque Natural de Las Lagunas de Ruidera que -ha dicho- "sería un disparate en el que nadie ha pensado".
El presidente ha asegurado que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha no se conformará con sofocar el incendio de turbas que afecta al Parque Nacional, sino que, aboga por "hacer un esfuerzo sostenible en el tiempo para conseguir la regeneración hídrica del Acuífero 23", cuya sobreexplotación es una de las causas que ha provocado la situación del parque nacional.
En este sentido, ha comentado que el Plan Especial del Alto Guadiana es el mejor plan posible para lograrlo, entre otras cuestiones, porque está consensuado mayoritariamente y apoyado por todos los sectores sociales.
Ha recordado delante del secretario de Estado que para llevar a cabo este plan es necesario la financiación necesaria, por la que ha dicho, "la reclamo con firmeza".
José María Barreda ha señalado que hay que actuar sobre la zona del acuífero 23 poniendo caudalimetros y controlando las extracciones, pero, también ha abogado por comprar derechos de agua, y actuar en la zona del pre-parque "de manera ejemplarizante, comprando los derechos o, incluso, expropiándolo sino los venden".
Para Barreda, "el pato no lo pueden pagar ni los propios patos, ni los agricultores, ni el conjunto de la sociedad que vive sobre el acuífero subterráneo".
El presidente ha agradecer la corresponsabilidad de las comunidades de regantes, la Organizaciones Profesionales Agrarias ante la situación que vive el acuífero, así como la sensibilidad y la capacidad crítica de los ecologistas para cuidar el medio ambiente.
Ha dejado claro su compromiso para sacar adelante esta situación que ha calificado de "difícil y compleja" y para lo que ha reclamado la complicidad y el acuerdo de todos.
Finalmente, ha terminado recordando el compromiso que con las siguientes generaciones existe para que "el Guadiana vuelva a abrir sus ojos, para que Las Tablas estén fuera de todo peligro, ahora y siempre, y para que la población que vive sobre los acuíferos subterráneos no viva mañana sobre un desierto".
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