Zaragoza.- La huelga en el sector del metal en las provincias de Zaragoza y Huesca sigue convocada para el próximo miércoles, día 28, y aunque la negociación sobre el convenio colectivo aún está abierta, el acuerdo es complicado.
Así lo han asegurado en rueda de prensa los secretarios generales del Metal de UGT y de Industria de CCOO, Luis Tejedor y Salvador Salas, respectivamente, quienes han indicado que por ahora no se ha alcanzado ningún acuerdo en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje, porque las propuestas de la patronal, en relación con los salarios, están "muy en línea" con la inicial y son "inaceptables".
La propuesta sindical, ha explicado Salas, pasa por un convenio de transición, ante la situación económica, con unas pretensiones económicas que no van "más allá" de cubrir el poder adquisitivo de los trabajadores del sector, en su mayoría peones (82%) que cobran 14.600 euros al año, ha apuntado Tejedor.
Aunque la distancia con la patronal no es insalvable, la patronal pretende, según Tejedor, dar a los trabajadores una "propina", con una subida salarial lineal no consolidada de 150 este año y 50 el próximo, lo que supone retrotraer conceptos "casi medievales", aprovechando, a su juicio, la situación general que vive el sector.
En ese sentido, Salas ha insistido en que los sindicatos son conscientes de que tomar como referencia una subida salarial del 2 por ciento es "complicado", pero al menos debe garantizarse el poder de compra de los trabajadores.
En su opinión, la huelga, a la que están llamados unos 35.000 trabajadores, en su mayoría en la provincia de Zaragoza, supondría un punto de inflexión en la estabilidad de las relaciones laborales que ha vivido el sector durante casi 30 años y se abriría una "espiral muy complicada".
Tejedor ha destacado además que se está negociando un acuerdo para pequeñas y medianas empresas cuyos trabajadores tienen "poca" capacidad de presión y la actitud de la patronal, a su juicio, es "provocar la movilización".
Salvo que haya un avance "objetivo" en la negociación, ha dicho Tejedor, no queda otra alternativa que la huelga, porque se está negociando un convenio para "los pobres con empleo", para que mantengan al menos el poder adquisitivo.
Por otra parte, han valorado el "gesto" de los trabajadores de la planta de General Motors en Figueruelas (Zaragoza) con la convocatoria de un paro de dos horas en solidaridad con el sector el día 28 con el que devuelven el apoyo que han tenido del resto de trabajadores y de la sociedad en general.
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