Quintero (Chile).- La presidenta chilena, Michelle Bachelet, inauguró hoy la primera planta de Gas Natural Licuado (GNL) en el país, que proveerá energía a unos siete millones de personas y que significó una inversión cercana a los 1.100 millones de dólares.
"La planta de GNL Quintero que estamos inaugurando hoy es la señal más potente del fin de un ciclo de dependencia energética y de cosecha del fruto de una nueva estrategia", aseveró Bachelet.
Explicó que, tras enfrentar una difícil coyuntura energética hace algunos años, cuando se combinaron las restricciones de la importación de gas natural y la sequía, el Gobierno se vio en la necesidad de pensar en grande para articular medidas de mediano y largo plazo.
"Hoy puedo decir con orgullo que el país pudo sortear la coyuntura, con mucho esfuerzo y al mismo tiempo, sentar las bases de una política energética de futuro rigurosa, que miraba lejos en términos de crecimiento y buscaba afianzar una matriz más sustentable", subrayó.
La planta de Gas Natural Licuado (GNL), situada a unos 140 kilómetros al noroeste de Santiago, frente a las aguas del Pacífico, producirá unos 20 millones de metros cúbicos diarios.
Esto minimizará la dependencia de Chile del gas procedente de Argentina, país con el que acordó en la segunda mitad de los años 90 comprarle 22 millones de metros cúbicos diarios de gas natural.
Desde 2004, ese flujo ha registrado crecientes restricciones e incluso cortes totales debido al aumento de la demanda interna en el vecino país y a la falta de inversiones para incrementar la producción.
En este contexto, Bachelet señaló: "No queremos que esta experiencia sea un caso aislado. El país tiene que ser capaz de generar las condiciones para que el desarrollo de nuestra matriz energética dé garantías de seguridad, estabilidad y sustentabilidad", recalcó.
Al respecto, destacó: "Debemos asegurar la energía para el desarrollo, a un coste que permita aumentar competitividad y también debemos asegurar nuestro futuro realizando todos los esfuerzos que estén al alcance para que el desarrollo sea equilibrado y, a la vez, sustentable".
Del mismo modo, Bachelet señaló que "Chile puede y debe hacer un esfuerzo voluntario también para contribuir al esfuerzo mundial para detener el calentamiento global, sin que por ello implique comprometer" su desarrollo.
En ese sentido, añadió: "Hemos avanzado en esta tarea. La puesta en marcha de esta planta es una sólida demostración de aquello".
"Ya no dependemos, como nos planteamos como meta, de un solo proveedor o de una sola fuente energética. También hemos visto el despliegue de las energías renovables no convencionales, las que, sin duda, irán adquiriendo también cada vez mayor gravitación", añadió.
Bachelet hizo un reconocimiento "a la visión y al liderazgo del presidente Ricardo Lagos (2000-2006), quien tomó la decisión y encargó a la Enap ( Empresa Nacional del Petróleo) levantar el proyecto que hoy día se concreta".
Los propietarios del GNL Quintero, que suministrará gas a los habitantes de las ciudades de Valparaíso, Santiago y Concepción, son la empresa británica BG Group, la generadora Endesa Chile, la chilena Metrogas y la estatal Enap.
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