Santander.- La Audiencia de Cantabria ha condenado a un año y tres meses de cárcel a un hombre que incumplió la orden de alejamiento que un Juzgado le había impuesto respecto de su ex mujer y que además agredió a los policías que actuaron una de las veces que cometió esos hechos.
Según señala la sentencia, el acusado, Óscar Javier G.J. tenía ya una condena por delitos de violencia género y violencia doméstica y el Juzgado le había impuesto, entre otras penas, la prohibición de comunicarse y acercarse a menos de 300 metros de su ex mujer.
Pese a que tenía "pleno conocimiento" de esa condena, el acusado se acercó a la calle General Dávila y, allí, fue sorprendido por dos jóvenes cuando estaba pinchando la rueda trasera de un vehículo, agachado y con un objeto punzante.
También causó daños en otro coche, que en esos días utilizaba su ex mujer.
Al día siguiente, Óscar Javier G.J. llamó por teléfono a esta persona desde una cabina y la describió su posición y sus vestidos e indumentaria.
Y tres días más tarde, incumplió el protocolo de entrega del hijo que tiene en común con esta mujer, cuando fue a llevarlo de vuelta con su madre en el Punto de Encuentro Familiar de la Gota de Leche.
Cuando su ex pareja llegó en coche a recoger al niño, Óscar Javier G.J. trató de hablar con ella en lugar de mantenerse alejado.
La mujer denunció estos hechos al policía encargado de vigilar el cumplimiento de la orden de alejamiento, y éste intervino cuando presenció este último suceso en el Punto de Encuentro Familiar.
El agente avisó a una dotación para que le diese apoyo pero Óscar Javier G.J. reaccionó de forma violenta y, aunque se resistió, finalmente fue detenido por la Policía, que tuvo que reducirlo.
Como consecuencia del forcejeo, dos de los agentes que intervinieron sufrieron lesiones.
El Juzgado de lo Penal número 1 de Santander condenó al acusado por estos hechos a dos años y tres meses de cárcel: un año por un delito continuado de quebrantamiento de condena, seis meses más por resistencia a la autoridad, y otros nueve meses por lesiones.
También le impuso sendas multas, de 120 y 180 euros, por faltas de daños y lesiones.
Y le obligó a indemnizar a los propietarios de los vehículos dañados, con 266 y 265 euros, y a los policías agredidos, con 900 y 2.051 euros.
La defensa de Óscar Javier G.J presentó un recurso contra esa condena, porque consideraba que no se había respetado el principio de presunción de inocencia y que tampoco se habían valorado correctamente las pruebas.
Pero la sección tercera de la Audiencia de Cantabria ha rechazado esos argumentos y ha confirmado en su totalidad el fallo del Juzgado de lo Penal número 1 de Santander.
Si quieres firmar tus comentarios puedes iniciar sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Subir al principio de la página
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si ya lo estás registrado puedes iniciar sesión ahora.