Santiago (R.Dominicana).- Un sacerdote jesuita criticó hoy la decisión de los asambleístas dominicanos que conocen la reforma a la Constitución del país de negar la nacionalidad a los hijos de extranjeros indocumentados y consideró que provocará un aumento de la delincuencia en la nación.
Regino Martínez, coordinador de la organización no gubernamental Solidaridad Fronteriza y del Servicio Jesuita para los Migrantes Refugiados en la provincia de Dajabón (noroeste, fronterizo con Haití), dijo a Efe que con esa decisión miles de niños de extranjeros ilegales no podrán acudir a los centros educativos porque no tienen documentos.
Las declaraciones del sacerdote tienen lugar luego de la votación en la Asamblea Nacional que rechazó una propuesta del diputado Frank Martínez, presidente de la Comisión de Verificación de la Asamblea Revisora, quien propugnaba por otorgarle la nacionalidad dominicana a los hijos de residentes ilegales que ingresaron al país amparados en contratos de trabajo.
En dicha votación, realizada el pasado septiembre, 132 asambleístas rechazaron la propuesta y 20 estuvieron a favor.
La Comisión de Verificación y Auditoría había recomendado a la Asamblea Nacional que conoce la reforma a la Constitución del país ampliar el jus solis (derecho a la nacionalidad por nacer en un territorio) para otorgar una amnistía a los hijos de los extranjeros que hayan llegado al país amparados en acuerdos o contratos para realizar trabajo agrícola.
El sacerdote sostuvo que con el rechazo a esta iniciativa, esos niños cuando sean adultos tampoco podrán trabajar dignamente ni declarar a sus hijos a pesar de que han nacido en territorio dominicano, tampoco podrán viajar ni hacer otras diligencias imprescindibles para el desarrollo personal y social de un ser humano.
"Simplemente esos niños, porque son hijos de haitianos indocumentados, serán apátridas", aseguró el religioso, al afirmar que la medida constitucional afecta, principalmente, a los hijos de ciudadanos haitianos.
Martínez calificó de "irracionalidad" aplicarle la ley a una gente que no ha nacido todavía, al asegurar que los hijos de los dominicanos ilegales que nacen en Estados Unidos, Puerto Rico, España y otras naciones, automáticamente adquieren la ciudadanía de esos países.
Asimismo, el jesuita aseguró que la inmigración haitiana a la República Dominicana continuará aumentando porque no hay una racionalidad y controles transparentes en la frontera.
También, pidió a las autoridades dominicanas que documenten a los haitianos indocumentados que trabajan en la agricultura, la construcción y otras áreas de la economía dominicana.
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