Lagos.- El Grupo de Contacto Internacional para Guinea (GCIG) pidió hoy el establecimiento de una Comisión Internacional para investigar la matanza ocurrida el pasado 28 de septiembre en Conakry, en la que murieron 157 personas al reprimir las fuerzas de seguridad una concentración opositora.
En un comunicado difundido tras un encuentro en Abuya, el CGIG señaló que en la represión llevada a cabo en Guinea se produjeron "graves abusos de los Derechos Humanos, incluida la matanza de civiles desarmados y violaciones", por lo que pide que se identifique a los responsables.
El Grupo de Contacto espera que los presuntos responsables sean juzgados por los tribunales competentes de Guinea o por la Corte Penal Internacional (CPI), "para acabar con la impunidad" en el país, gobernado desde diciembre pasado por una junta militar golpista.
En la nota, el CGIG reclama al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que en colaboración con la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO), y la Unión Africana (UA), y con el apoyo de la Alta Comisaría para los Derechos Humanos, "facilite el establecimiento de la Comisión Internacional de Investigación".
Además, el Grupo de Contacto insta a la CEDEAO a crear una misión de observación y protección internacional, con personal civil y militar, para "proteger a los miembros del grupo de investigación y a los testigos contra actos de intimidación y para favorecer un ambiente de seguridad para el pueblo de Guinea".
Además, propone la adopción inmediata de medidas para "imponer sanciones adecuadas a los supuestos responsables que sean identificados y condenar las acciones brutales, violaciones y la matanza cometida por tropas bajo la autoridad de la junta militar golpista contra mujeres y civiles desarmados".
Reclama, asimismo, que sean liberados todos los presos políticos detenidos desde el pasado 28 de septiembre, que se devuelvan los cuerpos hechos desaparecer por los militares a sus familiares, y que se permita a las personas hospitalizadas y en especial a las mujeres violadas recibir libremente asistencia médica.
Además, exige que se levanten los obstáculos a la libertad de expresión, movimiento y reunión, y que se impida a los militares portar armas de guerra fuera de los cuarteles.
En un llamamiento al jefe de la junta militar, el capitán Moussa Dadis Camara, el Grupo de Contacto solicita que formalice antes del 17 de octubre próximo su renuncia y la de todos los miembros del organismo militar y del Gobierno a presentarse a las elecciones previstas para el próximo enero.
De no cumplirse estas exigencias, el GCIG solicita a la UA y al resto de organizaciones internacionales que "tomen medidas apropiadas" para sancionar a los responsables de la represión en Guinea.
La situación política, de seguridad y de los Derechos Humanos en Guinea ha empeorado desde que el pasado 28 de septiembre las fuerzas de seguridad mataron a 157 personas al reprimir una concentración opositora en la que se exigía la renuncia de Camara a presentarse a las elecciones.
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