La Habana.- La industria del azúcar de Cuba tuvo pérdidas por 127 millones de dólares en el último año, debido al bloqueo comercial y financiero que Estados Unidos aplica a la isla desde 1962, según informó hoy el viceministro cubano del Azúcar, Nelson Labrada.
El funcionario indicó en rueda de prensa que el bloqueo estadounidense encarece los gastos de esa industria en un 35 por ciento y que en la última década ha causado pérdidas anuales de unos 100 millones de dólares.
Labrada explicó que más de la mitad de esos 127 millones de dólares tienen que ver con las operaciones realizadas por concepto de importaciones, debido a las limitaciones de comercio con la isla que promueve el bloqueo de Washington.
Precisó que las ganancias de esa industria podrían multiplicarse por tres con la venta a Estados Unidos de productos derivados del azúcar, principalmente ron y aguardiente.
En opinión de Labrada, la llegada de Barack Obama a la Casa Blanca este año significó una promesa de cambio, pero el bloqueo contra Cuba y, en especial, contra el sector azucarero, se ha "recrudecido".
"Ese bloqueo sigue ahí, no ha aflojado ni un tantito, yo diría todo lo contrario, hay mucha más agresividad", añadió, y recordó que Estados Unidos mantiene medidas como la persecución a las instituciones bancarias y financieras que negocien con Cuba.
El Gobierno cubano ha divulgado a lo largo de la semana -en comunicados, ruedas de prensa y noticias de medios oficiales- las pérdidas millonarias que asegura ha causado el bloqueo económico estadounidense en diversos sectores productivos.
La campaña informativa se produce en vísperas de una nueva votación sobre el bloqueo de EE.UU. en la Asamblea General de la ONU.
Sobre las perspectivas del sector azucarero cubano para 2010, Labrada reconoció que las pérdidas pueden ser mayores, pues a los efectos del embargo se sumarán los de la crisis internacional, en medio de una tendencia alcista del precio del azúcar.
Explicó que ese aumento no cambiará por ahora el panorama de la industria azucarera cubana, que entre 2002 y 2004 sufrió una reestructuración que disminuyó la superficie cultivada de caña de dos millones de hectáreas a unas 750.000.
"La caña de azúcar en las condiciones cubanas requiere como mínimo entre 14 y 16 meses para crecer. Por lo tanto, el precio ésta excelente pero no va a ocurrir un incremento espectacular de la producción. Debemos mantenernos a niveles similares a los de los últimos dos años", señaló.
En la temporada 2008-2009, Cuba produjo 1,4 millones de toneladas de azúcar y facturó más de 600 millones de dólares gracias a esa industria.
Según Labrada, la prioridad para el sector es aumentar la eficiencia de la temporada 2009-2010, que comenzará el próximo diciembre, y garantizar "el máximo de posibilidades" para la caña disponible.
"Ya no somos la locomotora de la economía cubana, somos otro sector importante de la economía", resaltó el viceministro, y apuntó que lo fundamental es garantizar el consumo nacional de azúcar y mantener los niveles actuales de exportación.
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