BILBAO.- El lehendakari y secretario general del PSE-EE, Patxi López, aseguró este sábado que las políticas de alianzas "que mejor definan el proyecto de cambio", se decidirán tras las elecciones municipales y forales, "desde el respeto a lo que manifieste el electorado", como es "tradición" en este partido.
En su intervención dentro del VI Congreso que el PSE-EE está celebrando este fin de semana en Bilbao, López insistió en que "lo que tengamos que hacer tras las elecciones municipales y forales, lo abordaremos después de las mismas".
Asimismo, en referencia al PNV, manifestó que el partido jeltzale "hoy se siente obligado a escenificar una voluntad de pacto" con el Gobierno vasco, "después de asegurar que no nos iba a dar ni agua". A su entender, este cambio del PNV se debe a que la formación que dirige Iñigo Urkullu es consciente de que "el acuerdo político que han propiciado" los socialistas en Euskadi, "es asumido y entendido por una sociedad que no está dispuesta a seguirles en su deriva radical".
López también reiteró su llamamiento a todas las fuerzas políticas vascas para que se cierren acuerdos presupuestarios en todas las instituciones, que estén "a la altura de la crisis económica".
DISCURSO
López comenzó su intervención ante los 508 delegados acreditados en el Congreso (94,7% del total) mandando un mensaje de apoyo a las familias y tripulantes del atunero "Alakrana" secuestrado en aguas del Indico para, a continuación, valorar la llegada de los socialistas vascos a la Lehendakaritza.
"Hemos llegado al Gobierno y hemos atendido a las víctimas del terrorismo y hemos puesto en marcha una política de tolerancia cero con la violencia y con los espacios para su propaganda y proselitismo. Y es lo normal, es lo que hay que hacer cuando el principal problema de este país es la existencia de una banda terrorista que quiere impedirnos vivir en paz y en libertad", manifestó.
Tras mostrar su intención de hacer del VI Congreso del PSE-EE un homenaje "a todos los compañeros y compañeras que han sido atacados y que han sido asesinados por ETA", señaló que éstos "han sido y son nuestro referente moral, ético y socialista".
López insistió en "por más que le gustara a alguno" éste es un gobierno "sólido y estable, porque se asienta en un gran acuerdo sobre objetivos de país, que pueden ser compartidos por todas las fuerzas democráticas de Euskadi".
Según explicó, estos objetivos son "la defensa de la legalidad y de las instituciones democráticas; el reconocimiento del pluralismo de la sociedad vasca; el compromiso contra el terrorismo y por su deslegitimación social y política; la voluntad de abandonar las políticas de frentes y optar, en cambio, por el diálogo entre diferentes para unir al país; y la atención prioritaria a los problemas reales de la gente".
VOLUNTAD DE MANTENER EL ACUERDO
Para el lehendakari, este acuerdo con el PP vasco, que constituye el "certificado de defunción de las políticas frentistas en Euskadi", se está cumpliendo, "está funcionando y tiene voluntad de mantenerse toda la legislatura". "Hemos pactado con quien ha estado dispuesto a abrir con nosotros un nuevo tiempo político en este país. Un acuerdo que, a diferencia de otros anteriores, no cierra la puerta a nadie, sino que las abre para todos", argumentó.
En este sentido, indicó que este acuerdo también está abierto para un PNV que "hoy se siente obligado a escenificar una voluntad de pacto con el Gobierno, después de asegurar que no nos iba a dar ni agua, porque es consciente de que el acuerdo político que hemos propiciado en Euskadi es asumido y entendido por una sociedad vasca que no está dispuesta a seguirles en su deriva radical".
Patxi López celebró que, en el PNV, vaya ganando terreno "la voz de la sensatez". "Espero que esa voz acabe imponiéndose, frente a tantas otras que siguen apostando por la acumulación de fuerzas nacionalistas y por los frentes que dividen al país", dijo, para asegurar que "este país sólo tendrá futuro, sólo tendrá posibilidades de avance, desde la suma, y no desde la disgregación ni desde peleas cuasi-tribales entre las diferentes instituciones".
En esta línea, reiteró su llamamiento a "sumar" para hacer posible que todas las instituciones -Gobierno vasco, Diputaciones y Ayuntamientos- cuenten con unos Presupuestos que "estén a la altura de la crisis económica".
Para llevar la contraria a los "agoreros que un día y otro también insisten en que lo peor está por venir", aseveró que "lo mejor está todavía por llegar, y llegará pronto, si todos nos ponemos a la tarea y confiamos en nosotros mismos".
ACCIÓN POLÍTICA DEL PSE-EE
Respecto a la futura acción política del Socialismo vasco, manifestó que tiene que orientarse a trabajar "más si cabe" por alcanzar el fin de ETA, "perseverando en la deslegitimación política y social del terrorismo, restableciendo una amplia cultura de libertad y tolerancia y ayudando a las víctimas a superar los horrores del terror".
El segundo gran objetivo, según manifestó, es disponer de toda la potencialidad de la política, de lo público, para hacer frente a las negativas consecuencias de la crisis económica. "Una tarea que hay que desarrollar sin olvidar que los responsables de la crisis son la derecha económica y la derecha política por los abusos cometidos, por la especulación y por la desregulación de la economía y del fenómeno de la globalización", indicó.
El reto del Gobierno vasco es "poner las medidas que reactiven la economía, que sostengan nuestro tejido industrial y empresarial, es ser capaces de invertir en infraestructuras para generar empleo, en I+D+i para mejorar nuestro valor añadido", explicó, para precisar que se hará "impidiendo que los más débiles se queden al margen, desenganchados del progreso y del bienestar de su propio país".
Asimismo, destacó que el VI Congreso del PSE-EE debe dar un respaldo "firme, nítido, al compromiso de los Socialistas, en Euskadi y en España, por llegar a acuerdos con las demás fuerzas políticas, para sumar mayorías y conseguir las modificaciones fiscales que consideremos buenas para el país".
EXTENDER LA NORMALIDAD
La tercera "gran tarea" del Socialismo vasco, a juicio de López, es "extender en el espacio y en el tiempo esta normalidad iniciada con el cambio, en lo que se refiere a la convivencia ciudadana y a la convivencia institucional".
Por último, anunció que los socialistas irán a las próximas elecciones municipales y forales para sacar mejores resultados que los actuales y será después de esas elecciones, como es "tradición" en el PSE-EE, "como fruto de los resultados, desde el respeto a lo que manifieste el electorado, y desde las necesidades que demande la gobernabilidad de las instituciones, cuando resolvamos las políticas de alianzas que mejor defiendan el proyecto de cambio".
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