Valladolid.- La primera quincena del presente mes de octubre será decisiva en el proceso de integración entre Caja España, Caja Duero y Caja Burgos, aunque está última entidad es la que más dudas plantea para cerrar un acuerdo que por ahora no implica el resto de cajas de Castilla y León.
Fuentes de Caja Duero han confirmado a EFE que antes del próximo día 15 se espera que esté concluido el informe encargado a la consultora KPMG, encaminado a analizar si es mejor la fórmula de la fusión en una única entidad o la alternativa de una integración en un grupo financiero pero sin que cada caja pierda su identidad.
Caja Duero, según estas fuentes de la entidad con sede en Salamanca, condiciona el acuerdo final, en espera de ese informe, a que se incluya un plan de viabilidad y otro en materia laboral, con prejubilizaciones para empleados a los que pueda afectar la decisión definitiva.
Por su parte, el Consejo de Administración de Caja España está convocado para el próximo día 8, con la incertidumbre de saber si por entonces Caja Burgos ha decidido unirse al proceso de integración o no.
Fuentes de la entidad financiera con sede en León han dicho hoy a EFE que ya en el Consejo de Administración que celebró la semana pasada algunos de los vocales se pronunciaron a favor de que se le diera un ultimátum a la caja burgalesa, ya que han considerado que se ha esperado tiempo suficiente y se debe despejar esta incógnita cuanto antes.
La fecha que se les ha dado en Caja España para que esté terminado el estudio propio de esta entidad está fijada en una horquilla que va del 7 al 10 de octubre.
Estas fuentes han explicado que lo importante no es tanto el conocer el estudio de la propia entidad, sino comparar los datos con el de Caja Duero y con el de Caja Burgos, si ésta se une al final.
Aunque fuentes de Caja Burgos han valorado la posibilidad de fusión, este decisión no se planteará a su Consejo de Administración hasta que no estén definitivamente aclarados aspectos como la sede de la entidad resultante, además de otros como su viabilidad financiera.
Mientras tanto, la Junta de Castilla y León se mantiene espectante ante en un proceso que fuentes del Gobierno autonómico esperan que se cierre a mediados de mes, pese a "la incertidumbre" sobre Caja Burgos.
Al respecto, han recordado que el Banco de España se ha posicionado a favor de fusiones que fortalezcan el sistema financiero y que en alguna ocasión se ha advertido del riesgo de absorción por entidades más fuertes, como Caja Madrid.
La Federación de Cajas de Ahorros de Castilla y León ha dado libertad de decisión a cada una de las seis entidades que la integran, que son Caja Duero, Caja España, Caja Burgos, Cajacírculo, Caja Ávila y Caja Segovia.
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