Teherán.- La Policía antidisturbios iraní, apoyada por los milicianos islámicos "Basij", reprimió hoy con dureza la manifestación de la oposición contra el régimen del presidente Mahmud Ahmadineyad, en la que se produjeron fuertes enfrentamientos.
La oposición aprovechó la celebración del Día de Apoyo a Palestina para protestar contra el régimen de Ahmadineyad, a quien acusa de haber sido reelegido de forma fraudulenta en los comicios del pasado junio.
El último viernes del mes sagrado musulmán de Ramadán está marcado en el calendario iraní como el "Día de Al Quds" (Jerusalén) y cada año se convoca una manifestación de apoyo a los palestinos y contra Israel.
Pese a las advertencias del régimen, los partidarios del denominado Movimiento Verde, el color de la oposición, se apoderaron de las calles céntricas de Teherán, donde apenas se había concentrado una minoría de seguidores de Ahmadineyad.
Provistos de banderas y símbolos reformistas de color verde, los manifestantes corearon consignas contra el Gobierno mientras hacían el símbolo de la victoria.
En los enfrentamientos, la Policía y los "Basij" reprimieron con abundante material antidisturbios a los opositores, que replicaron lanzando piedras y botellas.
Los partidarios de Ahmadineyad rodearon a varios dirigentes reformistas, como el antiguo candidato presidencial Mehdi Karrubi y ex presidente Mohamad Jatamí, quien fue empujado y su turbante rodó por el suelo y a quien sus seguidores rodearon para protegerlo de una agresión antes de que interviniera la policía, indicaron varios testigos a EFE.
Según la agencia estatal iraní Irna, el vehículo en el que viajaba el líder opositor Mir Husein Musaví fue alcanzado por piedras y otros objetos contundentes lanzados por los partidarios de Ahmadineyad.
Según algunos manifestantes, varias personas resultaron heridas, y tras los golpes y las carreras el centro de la capital quedó sembrado de multitud de piedras, botellas y todo tipo de objetos desperdigados por el suelo.
La contundente acción policial y de los "Basij" impidió que los manifestantes continuasen con la protesta en torno a la Universidad de Teherán, adonde habían anunciado que acudirían antes del sermón del viernes.
Las calles adyacentes y los accesos al recinto universitario permanecían fuertemente custodiados por la Policía, que había situado numerosos controles para impedir el paso de los manifestantes.
Sólo los "Basij" y los partidarios de Ahmadineyad podían franquear los accesos a la Universidad, cuyo entorno permanecía tranquilo poco antes de la oración del viernes, protagonizada hoy por el sermón del ayatolá Ahmad Jatamí.
Mientras se producían estos incidentes, Ahmadineyad pronunciaba un discurso en la Universidad de Teherán en el que volvía a arremeter contra Israel y a negar la existencia del Holocausto judío.
Ahmadineyad afirmó que la comunidad internacional tiene la "obligación" de asumir sus responsabilidades frente a Israel para asegurar la paz global.
Asimismo, instó a las naciones del mundo, y en particular a las de la región, a levantarse contra Israel, porque -dijo- su sola existencia las "pone en peligro" y aseguró que contener al Estado judío es un "principio humanitario".
"El régimen sionista es un símbolo de mentiras y decepción, que se funda en actitudes colonialistas", añadió Ahmadineyad en el discurso, según el canal de televisión "Press TV".
El presidente iraní, como ha hecho en otras ocasiones, volvió a poner en duda el Holocausto, que costó la vida de seis millones de judíos, exterminados por los nazis durante la II Guerra Mundial (1939-1945).
"Si el Holocausto, como ellos dicen, es verdad, ¿por qué no ofrecen pruebas?", se preguntó.
"Mentiroso, ¿Dónde está tú 64 por ciento" coreaban los congregados en algunas de las abarrotadas arterias del centro de Teherán en alusión al porcentaje de votos atribuido a Ahmadineyad, en las elecciones del pasado 12 de junio.
A la consigna oficial de "Muerte a Israel", los opositores y disidentes replicaban "Muerte a Rusia", en referencia al apoyo del Gobierno de Moscú a Ahmadineyad.
"Muerte al dictador", proseguían coreando los manifestantes que trataban de continuar la protesta en torno a la Universidad de Teherán, donde el ayatolá Ahmad Jatamí iba a pronunciar el sermón semanal.
Durante el recorrido los reformistas y opositores al Gobierno de Ahmadineyad se encontraron con Mehdi Karrubí, quien transitaba rodeado por sus guardaespaldas.
"Valiente, te apoyamos", proclamaban los más exaltados que advertían que la detención de Karrubi supondría una "revuelta en Irán".
Si quieres firmar tus comentarios puedes iniciar sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si ya lo estás registrado puedes iniciar sesión ahora.