SAN SEBASTIÁN.- Miles de personas tomaron parte este sábado en la marcha silenciosa convocada por el colectivo de familiares de presos de ETA, Etxerat, y autorizada por el departamento vasco de Interior, a favor de los "derechos" de estos reclusos en San Sebastián.
La manifestación partió pasadas las 17.30 horas del túnel del Antiguo en la capital guipuzcoana, donde se habían colocado dos pancartas una en la que se podía leer 'Euskal Presoak Etxera' (Los presos vascos a casa') y otra en la que se llamaba a participar en la marcha que tendrá lugar el próximo día 19 en San Juan de Luz (Francia) para denunciar por la desaparición del miembro de ETA, Jon Anza.
En la cabecera iban familiares de reclusos de la banda terrorista que lucían pañuelos con el anagrama de Etxerat anudados al cuello, entre ellos el portavoz de este colectivo y hijo y hermano de los presos de ETA, Txomin y Jon Troitiño, Mattin Troitiño.
También tomaron parte en la marcha, que transcurrió entre aplausos de los manifestantes y algunos 'irrintzis' y sin que se produjeran incidentes, el ex preso de ETA Anjel Alkalde; el dirigente de Batasuna Rufi Etxeberria, detenido y encarcelado por orden del juez Baltasar Garzón el 4 de octubre de 2007 tras su participación en una reunión en Segura convocada para elegir una nueva Mesa Nacional de la coalición abertzale y puesto en libertad esta misma semana.
Además, estuvieron presentes en esta movilización los históricos de Batasuna Xabi Zubizarreta y Jon Gorrotxategi, así como Pepe Rey, quien fuera redactor jefe del diario Egin.
La manifestación, controlada por seis furgonetas y el helicóptero de la Ertzaintza, discurrió por el paseo de la Concha, la calle San Martin, el paseo de Los Fueros, y la calle República Argentina hasta el Boulevard donostiarra. Durante su discurrir agentes de la Ertzaintza arrancaron algunas fotos de presos de ETA colocados en paradas de autobuses y algunas pancartas colocadas en distintos puntos de la ciudad.
Una vez en el Boulevard donostiarra tuvo lugar un acto con música en directo, txalapartas y la intervención de un bertsolari en el que Manu Errazkin, representante de Etxerat y padre de la preso de ETA Ohiane Errazkin que apareció ahorcada en la cárcel francesa de Fleury-Merogis, llamó a "todos los agentes políticos, sociales y económicos" a "estrechar lazos" y "aglutinar fuerzas y compromisos" para que "se evidencie" que la "mayoría" de esa masa social, política y económica vasca "está a favor del respeto de los derechos de los presos".
En este sentido, insistió en que hay que "trabajar conjuntamente" por "los derechos" de estos reclusos y "mantener encendida la llama de la solidaridad" con los mismos, a pesar de que el Estado busque "criminalizar" este movimiento.
Errazkin denunció que el Gobierno vasco y central busca "infundir el miedo" para poner fin a esa "solidaridad" con los reclusos de la banda terrorista, pero "no lo van a conseguir". "La presencia de los presos políticos vascos no va a desaparecer de las calles", aseveró. Finalmente, se felicitó de que la "masiva" marcha de este sábado ha puesto en "evidencia" la "cruda realidad" que vive este colectivo. Tras su intervención los congregados profirieron gritos como 'Euskal presoak etxera' ('Los presos vascos a casa') y ('Presoak kalera amnistia osoa') ('Libertad para los presos').
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