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Doménech pide una nueva ley de universidades canarias que fije un modelo estable

EFE
Actualizado 11-09-2009 18:13 CET

Santa Cruz de Tenerife.-  El rector de la Universidad de La Laguna, Eduardo Doménech, pidió hoy al Gobierno de Canarias una nueva ley de las Universidades Canarias, que incluya de forma estable el modelo de financiación universitaria y los principios y criterios de funcionamiento de los centros académicos.

Estos criterios deben posibilitar "que trascendamos del actual estatus de dualidad compatible entre las dos universidades canarias para alcanzar el necesario nivel de vertebración del sistema universitario canario", dijo Doménech en el acto de inauguración del curso académico 2009-2010.

El rector pidió que se supere el hábito de planificar para lo inmediato y se aborde con garantía "de futuro y valentía las necesarias reformas estructurales" y señaló que si a las universidades se les pide asumir su papel en el desarrollo de Canarias hay que dotarlas de los instrumentos jurídicos.

En el acto, al que asistió, entre otros el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, Doménech destacó los momentos de cambio que se viven en el ámbito universitario y subrayó que a la universidad se le plantea el reto de "repensar y redefinir" la misión de los centros académicos.

En su opinión, es preciso aprovechar esta época de cuestionamientos e incertidumbres para reflexionar sobre el papel de la institución formativa y de conocimiento y preguntar qué es lo que la sociedad espera de la universidad.

Aludió a diferentes estudios que avalan la percepción positiva que se tiene de la universidad, de cuyo trabajo se esperan beneficios para la sociedad, pretensión que a juicio de Doménech es legítima, ya que el sentido mismo de la institución universitaria que no es otra que formar e investigar.

Además, agregó el rector, existe una tercera misión que es contribuir a través de la transferencia de conocimiento, formativo y científico, al desarrollo económico y cultural, y opinó que este objetivo sólo es posible si la sociedad apoya a la universidad.

Doménech insistió en que la "la batalla de supervivencia" para la transformación del actual modelo no se puede limitar a un periodo de tiempo, sino que debe tener un horizonte temporal más amplio y debe tener como propósito alcanzar la media europea de financiación universitaria que está situada en el 2 por ciento del Producto Interior Bruto frente al 1, 2 por ciento que destina España.

Consideró que la Universidad de La Laguna ya está cambiando y como ejemplo citó la apertura temprana del curso y la implantación del nuevo calendario académico con la innovación de las pruebas de recuperación en julio.

Además aludió a la adaptación de las titulaciones al espacio europeo y a la aprobación de 19 títulos de grado, y sobre los que critican el Plan Bolonia por entender que introduce criterios de mercado en los estudios, Doménech afirmó que se vive en un mundo competitivo "y no podemos elegir no serlo".

No obstante apuntó que los alumnos, aunque no se deben obsesionar con ser los primeros, deben desterrar la teoría de la mediocridad y comprometerse más con la formación, porque así será más fácil su integración en el mundo laboral.

Se refirió al plan estratégico de la Universidad y señaló que el conocimiento producido por las universidades debe ser transferido en forma de innovación a las sociedad, porque ello favorecerá mejoras educativas, sanitarias y comunitarias.

Doménech afirmó que en el próximo curso pretende debatir y concluir la reforma de los estatutos de la ULL, implantar la administración electrónica, desarrollar el proyecto de campus de excelencia internacional , poner en marcha la Fundación Mecenazgo, implantar nuevos grados y realizar un plan de prejubilaciones.

Afirmó que para llevar a cabo estas innovaciones, la universidad necesita autonomía, lo que significa, agregó, comprender que los universitarios "asumimos nuestra triple misión con responsabilidad y que estamos comprometidas con ella".

El acto de inauguración del curso académico se celebró en el restaurado Paraninfo de la Universidad de La Laguna, cerrado desde 2001, y comenzó, además de con la memoria académica del curso pasado, con la lección inaugural del catedrático de Filología Española, Juan Manuel García Ramos, titulada "Elogio a la literatura".

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