Viena.- Qatar aseguró hoy que no es momento de recortes de producción en la OPEP por las incertidumbres económicas, aunque reconoció que el nivel de las reservas petroleras es alto y las perspectivas de la demanda aparecen "sombrías".
Así lo explicó hoy a un grupo de periodistas el ministro de Energía del emirato árabe, Abdulá Bin Hamad al-Atiyah, a su llegada a Viena para participar mañana en la reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
"No creo que ahora sea el momento de cortar la producción. Creemos que la economía mundial está inmersa en muchas incertidumbres y no queremos dañarla. Tenemos que ser muy cautelosos", recalcó el titular qatarí, quien es también viceprimer ministro de su país.
El mandatario aseguró que la situación de la demanda va en correlación a la economía, por lo que calificó el actual nivel de consumo como "sombrío", y lamentó el alto nivel de las reservas de crudo acumuladas en los principales países consumidores.
Así, Al-Atiyah consideró que existen algunas señales positivas en la economía, pero la visión de conjunto sigue siendo negativa.
Por ello, afirmó, la OPEP seguirá el desarrollo de los acontecimientos con atención en los próximos meses invernales, en los que tradicionalmente sube el consumo energético debido al uso de la calefacción en los hogares y la industria del industrializado hemisferio norte del planeta.
"Me parece que la especulación tiene una gran fuerza. La semana pasada el precio del crudo estaba a 66 dólares y hoy ha dado una gran salto de más de tres dólares", señaló Al-Atiyah.
Aun así, consideró muy difícil atajar esa actividad especulativa, aunque reconoció que en estos momentos hay muchas discusiones sobre cómo se podrían hacer más transparente los mercados de futuros.
Otro de los asuntos que trató el ministro fue la falta de apoyo, que, a su juicio, recibe la OPEP en sus esfuerzos para estabilizar los mercados por parte de países productores de petróleo ajenos a la organización, en una clara alusión a Rusia, el principal competidor de la OPEP, que en los últimos meses ha aumentado su bombeo hasta más de 10 millones de barriles diarios.
"Estamos hartos del apoyo de palabra, necesitamos apoyo físico de los países no pertenecientes a la OPEP", clamó el ministro.
"Estamos viendo cosas extrañas, como que algunos países incrementen su producción al mismo tiempo que apoyan las decisiones de la OPEP", abundó el ministro, en una clara alusión a Moscú, que en las reuniones anteriores de la OPEP envío a sendas delegaciones de alto nivel como observadores, y aseguró que apoyaba los esfuerzos de la organización y deseaba un mayor acercamiento a la misma.
Rusia ha superado, según las estimaciones de los especialistas, a Arabia Saudí como el primer productor mundial de petróleo, aprovechándose de la subida de los precios que se han conseguido en gran parte por los recortes de la OPEP.
Tras reducir en 4,2 millones de barriles diarios el volumen de extracción que tenía el grupo en septiembre de 2008, el precio del crudo rebotó de un mínimo de menos de 35 dólares (por barril) en diciembre del año pasado hasta rozar los 75 dólares en agosto, antes de moderarse a menos de 70 dólares.
En los mercados de futuros de Londres y Nueva York, el "oro negro" se disparaba hoy, impulsado sobre todo por un fuerte debilitamiento del dólar frente al euro y otras divisas, y volvía a situarse en torno a los 70 dólares el barril.
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