PARÍS.- El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, afirmó este lunes que Estados Unidos está criticando a sus familiares y colaboradores para socavar su posición y hacerle así más influenciable. En una entrevista publicada por el diario 'Le Figaro', el mandatario aseguró que el fraude electoral es "inevitable" y se mostró seguro de su victoria por mayoría absoluta en la primera vuelta de las presidenciales.
"No seré una marioneta de Estados Unidos", sentenció Karzai. "Los americanos atacan a Karzai a escondidas porque les gustaría que fuera más flexible. Es un error. Va en su propio interés, como amigos y aliados, que Afganistán tenga un presidente respetado por su pueblo. ¡No interesa a nadie que el presidente de Afganistán se convierta en una marioneta de Estados Unidos!", afirmó.
Karzai respondía así a las preguntas sobre las informaciones difundidas relativas a su candidato a vicepresidente, Fahim Jan, acusado de transportar opio en aviones militares mientras era ministro de Defensa; o a su propio hermano, Walid Karzai, acusado de ser un traficante de droga.
El presidente afgano aseguró que la Embajada estadounidense en Kabul no ha respondido a dos cartas suyas pidiendo pruebas de los supuestos delitos de su hermano, considerado como uno de los señores de la guerra afganos por la ONG Human Rights Watch. "Dicho esto, no voy a negar que hay un gran problema de corrupción en nuestra administración. Mi prioridad es combatirlo. Pero voy también a demandar más transparencia a nuestros socios extranjeros", dijo.
FRAUDE INEVITABLE
Con respecto al supuesto fraude denunciado por el principal candidato opositor en las elecciones presidenciales del pasado 20 de agosto, el ex ministro de Asuntos Exteriores Abdulá Abdulá, Karzai aseguró que el fraude es "inevitable".
"Hubo fraude en las elecciones (presidenciales) de 2004, lo hubo ahora y lo habrá mañana. Desgraciadamente es inevitable en una democracia naciente, pero nuestra ley otorga las competencias necesarias a una comisión independiente (...) para pronunciarse sobre las denuncias presentadas y corregir los resultados. Por mi parte, respetaré el resultado final, cualquiera que sea", dijo.
En cualquier caso, se mostró seguro de poder lograr la mayoría absoluta en primera vuelta y evitar así la convocatoria de una segunda ronda. "En 2004, obtuve un 54,5% en la primer vuelta gracias al apoyo del sur, Kabul y Herat. Esta vez, cuento con el apoyo adicional de la comunidad uzbeka y de una buena parte de los hazaras y tayikos. Pienso, pues, mejorar mi resultado", indicó. "En realidad, la gente votó exactamente como en 2004. Afganistán, es una sociedad tradicional, tribal. La gente vota colectivamente", explicó.
En cuanto a su programa de acción, Karzai destacó que tiene previsto proponer un diálogo de reconciliación nacional con los talibán en los cien primeros días de mandato, aunque estableció como condición la renuncia a los vínculos con Al Qaeda y el reconocimiento de la Constitución afgana, "algo que Arabia Saudí debe de tener muy presente".
Además, Karzai quiso diferenciar entre insurgencia y terrorismo, una diferencia de criterio con el mando de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF). "Mi opinión difiere de la suya (de la del general Stanley McChrystal, comandante de la ISAF) cuando asimila la guerra contra el terrorismo con la contrainsurgencia. La insurrección es algo completamente diferente al terrorismo, es un asunto interior afgano. Concentrémonos en la guerra contra los terroristas y a sus ramificaciones internacionales", indicó.
Karzai también hizo referencia al bombardeo aliado del pasado viernes en el que murieron al menos 95 personas, muchas de ellas civiles. "¡Qué error de juicio! ¡Más de 90 muertes por un simple camión, que, por añadidura, estaba inmovilizado en el lecho de un río! ¿Por qué no enviaron tropas de tierra para recuperar el camión cisterna? El general McChrystal me llamó por teléfono para presentarme sus excusas y decirme que él no había dado la orden de bombardeo", explicó.
En cuanto a sus logros y fracasos, Karzai aseguró que con él, "Afganistán vuelve a ser para los afganos". "Comunistas, muyahidines, religiosos, no religiosos, hombres, mujeres, ricos, pobres,... todos han vuelto de nuevo a Afganistán (...). Restablecimos un Estado", dijo. Por otra parte, Karzai reconoció que no han logrado "aportar paz a todo el territorio". "No hemos podido vencer al terrorismo, una responsabilidad que comparto con la comunidad internacional", matizó.
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