Berlín.- Alemania recibe mañana a Sudáfrica en un amistoso en el que tiene como principal objetivo mejorar el rendimiento ofensivo, para lo que el seleccionador Joachim Löw parece haberse encomendado al buen momento por el que pasa el centrocampista Mesut Özil.
Hoy, el segundo entrenador, Hansi Flick, anunció que mañana Özil jugaría desde el principio, lo que en principio debía ser una obviedad, puesto que el centrocampista del Werder Bremen es por el momento el jugador más en forma de la selección alemana.
Sin embargo, de cara al duelo de mañana y al partido de la eliminatoria mundialista contra Aserbaiyán el próximo miércoles, Löw ha venido tomando decisiones que han hecho pensar a muchos que el seleccionador no se rige necesariamente por el rendimiento que tengan los jugadores en el momento de un compromiso determinado.
La ausencia del delantero Stefan Kiessling en la convocatoria -que ha empezado bien la temporada- y la presencia de Miroslav Klose, de Lukas Podolski y del brasileño nacionalizado Cacau -que no andan bien- ha generado críticas y se ha dicho que Löw está pensando más en los méritos del pasado que en la forma actual de los jugadores.
A Özil lo estaba pidiendo todo el mundo y Löw ha decidido darle gusto a sus críticos en esos puntos. La intención es que el jugador, que jugará probablemente recargado contra la banda izquierda, abra más espacios con su habilidad y ayude a que los delanteros lleguen en mejor posición ante la portería contraria.
Adelante, es de esperar que estén Klose y Mario Gómez.
El ensayo es importante no sólo de cara al partido contra Aserbaiyan, que Alemania debe ganar sin problemas, sino, ante todo, para definir algunas cosas pensando ya en los duelos más difíciles ante Finlandia y Rusia, que son decisivos para la eliminatoria mundialista
Sudáfrica llega al partido con varias bajas, empezando por la del portero titular Itumeleng Khune que tendrá que ser sustituido por Rowen Fernández. En el centro del campo faltarán el volante de contención MacBeth Sibaya y el volante de armado Teko Modise,
El equipo sudafricano, dirigido por Joel Santana, ha perdido sus últimos cuatro partidos en casa y en Leverkusen empieza una gira europea que lo llevará a Irlanda, Noruega e Islandia.
Si no hay victorias en la gira, la presión sobre Santana puede crecer, a menos de un año del Mundial en casa.
Alineaciones probables:
Alemania: Enke; Lahm, Mertesacker, Tasci, Schäfer; Schweinsteiger, Ballack, Hitzlperger, Özil; Gómez y Klose.
Sudáfrica: Fernández; Gaza, Khumalo, Mokoena, Masllela; Pienaar, Mhlongo, Dikgakoi, Tschabalala; Mpela y Parker.
Arbitro: Circhetta (Suiza)
Estadio: BayArena de Leverkusen.
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