Buenos Aires.- El Senado argentino convirtió hoy en ley un proyecto que declara la emergencia agropecuaria y crea un millonario fondo de ayuda al sector en medio de protestas de productores rurales a las puertas del Parlamento.
La iniciativa, que hace dos semanas había recibido el visto bueno de la Cámara de Diputados, dispone que se destinen 500 millones de pesos (129,5 millones de dólares) para mitigar daños causados por fenómenos climáticos y recuperar la capacidad productiva del campo.
El proyecto impulsado por el Gobierno fue respaldado por los 62 legisladores presentes en el Senado al cabo de un breve debate durante el cual no fue permitido el acceso de público al recinto de sesiones para evitar incidentes.
Para conseguir la aprobación de la ley el oficialismo accedió a incrementar el monto de la ayuda previsto originalmente, tal como reclamaban la oposición y las patronales agropecuarias, que llevan más de un año de conflicto con el Gobierno a causa de la presión y las regulaciones del Fisco.
El proyecto establece que en caso de que no se utilice todo el dinero incluido en el fondo, el excedente se destinará a la prevención y además dispone la creación de una Comisión Nacional de Emergencia Agropecuaria en la Secretaría de Agricultura integrada por todos los sectores involucrados.
Entre otras demandas, los productores rurales vienen reclamando ayuda económica debido a que el año pasado el sector sufrió la peor sequía de las últimas décadas.
Piquetes de agricultores que rechazan la ayuda por insuficiente, entre otras objeciones, cortaron el tránsito en una de las avenidas que lindan con la sede del Parlamento, donde se han concentrado bajo la vigilancia de decenas de policías.
Las organizaciones del campo también se oponen a que el Legislativo prorrogue por un año las facultades que delegó en el Gobierno, entre ellas la atribución para fijar los impuestos a las exportaciones de granos que rechazan las patronales del campo.
Debido a que el Senado tiene previsto para hoy analizar ese proyecto, que también fue aprobado por la Cámara de Diputados, los manifestantes aseguraron que permanecerán en cercanías del Parlamento mientras transcurra el debate.
Las entidades rurales están enfrentadas con el Gobierno por las regulaciones que pesan sobre el sector y desde hace más de un año exigen una reducción de los impuestos a las exportaciones de granos que el Ejecutivo se niega a conceder.
Tras intentar sin éxito ingresar al Parlamento junto a un grupo de productores, el dirigente de la Federación Agraria Alfredo De Angeli advirtió que la ley de emergencia agropecuaria es "inconstitucional", aunque no explicó por qué motivo.
"Yo no quisiera volver nunca más a los cortes de ruta, pero si la mayoría quiere no nos queda otra", declaró a periodistas sobre la posibilidad de que las patronales rurales retomen las protestas que efectuaron el año pasado en repudio a los impuestos móviles a las exportaciones de granos establecidos por el Gobierno.
Ese sistema fue rechazado por el Senado en julio de 2008 con un voto de desempate del vicepresidente argentino, Julio Cobos, lo que supuso un duro revés político para el Ejecutivo que preside Cristina Fernández.
Desde entonces, permanece fija la alícuota de los tributos a la exportación de trigo (23%), maíz (20%), girasol (32%) y soja (35%), que en la última década se ha convertido en el mayor cultivo del país.
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