Madrid.- El juez Santiago Pedraz ha procesado hoy al jefe del último "comando Vizcaya", desarticulado en julio de 2008, Arkaitz Goikoetxea, y a otro de sus integrantes, Aitor Artetxe, como autores del atentado con furgoneta-bomba en el club marítimo de Getxo, el 19 de mayo de 2008, que sólo causó daños materiales.
En el auto de procesamiento, el magistrado de la Audiencia Nacional les acusa de un delito de estragos terroristas y les impone una fianza de 500.000 euros para hacer frente a la responsabilidad civil en caso de ser condenados por estos hechos.
El juez ha fijado para el próximo 1 de septiembre la toma de declaración indagatoria a los procesados, aunque sólo podrá comparecer Goikoetxea, ya que Artetxe se encuentra preso en Francia, donde fue detenido el pasado diciembre junto al ex dirigente etarra Aitzol Iriondo, sucesor del número uno de ETA Garikoitz Aspiazu, "Txeroki", que había sido arrestado un mes antes.
Según relata Pedraz en su resolución, Goikoetxea fue el encargado de aparcar junto al club marítimo El Abra, en el paseo marítimo de Getxo, la furgoneta-bomba -una Citroën Berlingo con matrícula de Bilbao que había sido sustraída-, que los terroristas hicieron explotar sobre la una de la madrugada del 19 de mayo.
En cuanto a Artetxe, el juez le atribuye haber recogido el explosivo empleado en esta acción "en la localidad riojana de Ezcaray, dirigiéndose luego al barrio de Fadura de Getxo", donde los dos etarras sustrajeron la furgoneta y se la llevaron a un monte para colocarla el artefacto explosivo.
El artefacto, indica el auto, estaba compuesto por "60 kilos de amonal, con el correspondiente iniciador eléctrico, temporizador, detonador, multiplicador de alto explosivo y tuercas como metralla".
Tras dejar la furgoneta aparcada en el lugar elegido para hacerla estallar, Goikoetexea se dirigió a pie al barrio de las Arenas de la citada localidad vizcaína y desde una cabina llamó, sobre las 00:05 horas, a la central de la DYA de Bilbao para alertar de la inminencia del atentado.
En esa llamada, el que fuera jefe del "comando Vizcaya" o "Askatasun Haizea" manifestó: "escuche atentamente, llamo en nombre de ETA. Dentro de una hora va a estallar una furgoneta bomba en el paseo marítimo, junto al club marítimo de Getxo. ¿Me ha entendido? Gora Euskadi askatuta. Gora ETA", aviso que repitió por segunda vez.
Posteriormente, se trasladó a Leioa, donde le esperaba Artetxe, y desde allí ambos se fueron a una pista del monte Iturgitxi, donde pasaron la noche.
La explosión de la furgoneta causó daños materiales, que afectaron a unas 114 personas, entre el propietario de la furgoneta y los del club marítimo, que sufrió graves daños tanto en su fachada como en el interior, así como los de las viviendas y locales aledaños, que sufrieron rotura de ventanas, balcones, vidrieras y escaparates, además de los daños producidos en el mobiliario urbano.
El pasado febrero, la Audiencia Nacional condenó por primera vez a Goikoetxea a 22 años de cárcel por un acto de "kale borroka" perpetrado antes de integrarse en ETA: el ataque a una patrulla de la Ertzaintza en Portugalete (Vizcaya), el 5 de agosto de 2001.
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