Toledo.- El deán de la Catedral de Toledo, Juan Sánchez, ha asegurado que la petición a los fieles de que sustituyan el tradicional beso a la medalla de la Virgen del Sagrario por un simple toque con la mano como medida preventiva contra la gripe A, solo trata de responder a las directrices de las autoridades sanitarias.
"Por razones de higiene y por recomendación médica, tóquese con la mano la medalla y no se bese. Puede besar su mano después", reza el cartel colocado por el Cabildo a los pies de la patrona de Toledo.
El Cabildo de la Catedral de Toledo ha hecho esa petición a los fieles "como medida preventiva, higiénica y de educación" ante el "aluvión" de personas que mañana, festividad de la Virgen del Sagrario, visitarán el templo primado para cumplir con la tradición centenaria de besar la medalla de la Virgen y beber del agua de los botijos del claustro.
Sánchez ha indicado a EFE que su intención, con este consejo, "no ha sido, en ningún momento, provocar la alarma social", sino ser realista con la situación actual y "responder a los directrices lanzadas desde la propia Unión Europea y las consejerías de Sanidad de todas las comunidades autónomas españolas".
Y ha agregado que, en las circunstancias actuales y teniendo en cuenta que mañana acudirán a festejar a la Virgen del Sagrario entre 3.000 y 4.000 personas, "nos ha parecido oportuno tomar esta precaución".
El responsable del Cabildo Catedralicio, quien ha considerado "un poco exagerado" el revuelo mediático que han provocado sus consejos, ha indicado que, de cara a la celebración mañana de muchas "vírgenes" en diversos lugares de España, sería aconsejable que se siguieran estas recomendaciones "por prevención y educación".
Sobre la reacción que esta recomendación puede suscitar entre los fieles, el deán ha opinado que, en general, cree que "se lo van a tomar bien, aunque puede que haya alguno de mucha fe que diga 'pues yo la beso' y, ante estos casos, no puedes oponerte".
Otro consejo del Cabildo con vistas a la celebración de mañana es que los fieles que no sepan beber a chorro del botijo de agua bendita, tradición que viene repitiéndose en la festividad de la Virgen del Sagrario desde hace cuatro siglos, se traigan un vaso de su casa.
Al igual que en el caso anterior, Sánchez ha insistido en que se trata de una medida higiénica, con la que se quiere evitar los posibles contagios de gripe "y, al mismo tiempo, respetar a las personas escrupulosas a quienes pueda molestar beber agua del botijo que otros han tocado con sus labios".
Por su parte, el consejero de Salud y Bienestar Social de Castilla-La Mancha, Fernando Lamata, ha aplaudido los consejos lanzados desde el Cabildo de la Catedral de Toledo, ya que se trata de medidas preventivas útiles para evitar posibles contagios, al tiempo que ha insistido en que "no hay motivo para la alarma".
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