Madrid.- El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha restablecido a primera hora de esta tarde el servicio en las dos vías del AVE de Madrid a Andalucía, tras cuarenta y una horas de interrupción, a causa de tormentas, en las que se han visto afectados 176 trenes y 22.956 viajeros.
El primer tren comercial del AVE que une Madrid con el sur de España pudo utilizar la vía dos a las 13:10, una vez que Adif finalizó, a las 12:10 las obras de reparación de la vía, cortada desde las 21:15 horas del lunes a causa de las tormentas que afectaron a la zona de la Sagra en Toledo. La primera de las vías pudo reabrirse ayer a las 16:00 horas.
El director de circulación de Adif, Antonio Berrios, y la directora del corredor sur de Ave y Larga Distancia de Renfe, Magdalena Bodelón, ofrecieron hoy una rueda de prensa conjunta, donde relataron los trabajos que se han llevado a cabo para subsanar el problema surgido por las inundaciones en las proximidades de Yeles (Toledo).
Está previsto que los trenes circulen por los cuatro kilómetros afectados a una velocidad de 30 kilómetros por hora, lo que supone, según Berrios un retraso aproximado de 7 a 8 minutos en el trayecto final. Esa velocidad se irá incrementando progresivamente y llegará a la normal en ese trayecto en el plazo aproximado de una semana.
En las labores de limpieza y reconstrucción de las dos vías se han empleado 2.500 toneladas de balasto, que han sido trasladados por 25 camiones que debieron limpiar primero los caminos de aproximación a la vía, dado que por la situación de la línea no se podía acercar ningún tren de trabajo hasta el lugar.
Durante las 41 horas que ha durado el problema, se han visto afectados 176 trenes y un total de 22.956 viajeros, indicó Magdalena Bodelón, quien añadió que "a todos nuestros pasajeros les hemos ofrecido tres alternativas".
La devolución del coste del billete, el cambio para realizar el viaje otro día, y la alternativa de viajar en autobús hasta Toledo y Ciudad Real, donde volver a tomar el tren con rumbo a su destino, indicó Bodelón, quien añadió que "hasta el momento hemos tenido 300 reclamaciones o quejas".
La interrupción del tráfico por la línea de alta velocidad entre Madrid y el sur de la Península, tuvo lugar a las 21,15 horas del lunes 10 cuando las señales situadas en la misma indicaron que había problemas en el trayecto a la altura de Yeles, en la comarca toledana de la Sagra.
En ese momento Adif comunicó a Renfe que se debía cortar el tráfico ante la falta de seguridad en ese trayecto, viéndose afectados los 16 trenes que circulaban en ese momento, que transportaban a 1.890 pasajeros, que fueron trasladados a las estaciones más cercanas, continuando su viaje en autobús.
El corte de esa parte de la línea se mantuvo hasta las 16 horas del martes, cuando se pudo abrir una de las dos vías afectadas, comenzando a circular por ella los primeros trenes, que llegaron a acumular hasta una hora de retraso.
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