Qala-I-Naw (Afganistán).- Los militares españoles han acogido hoy con escepticismo el anuncio de alto el fuego decretado por los talibanes en la provincia afgana de Badghis, donde se encuentra desplegada una parte de las tropas.
Así lo han comentado algunos militares concentrados en la base de Qala-I-Naw, que hoy ha visitado la ministra de Defensa, Carme Chacón, con motivo del viaje oficial de dos días que ha realizado a la zona.
El anuncio de alto el fuego se conoció ayer poco antes de que la ministra se entrevistara con el presidente de Afganistán, Hamid Karzai.
A pesar de ello, Chacón ha asegurado que España mantendrá los efectivos desplegados en la zona, que se reforzaron recientemente con 450 soldados para garantizar que las elecciones del próximo 20 de agosto se celebran con normalidad.
Y es que no son pocos los militares que creen que el anuncio de alto el fuego puede deberse a una estrategia de los talibanes y que, por tanto, lejos de reducirse la violencia, ésta se recrudecerá en los próximos días, a medida que se acerque el proceso electoral.
El objetivo de los insurgentes talibán es que los comicios afganos fracasen para dejar en evidencia a la comunidad internacional y al Gobierno afgano, ha asegurado un mando de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (ISAF).
La comunidad internacional, por contra, considera clave que las elecciones se celebren con normalidad para que los afganos puedan ir consolidando sus instituciones, cuestión que la ministra de Defensa ha considerado fundamental para el desarrollo del país.
Precisamente ésta ha sido una de las preocupaciones que Chacón trasladó ayer al presidente de Afganistán, Hamid Karzai, con quien se entrevistó en Kabul y a quien pidió una mayor implicación de su Gobierno en este sentido.
Entretanto, algunos de los militares destacados en la base de Qala-I-Naw, encargados de facilitar la estabilización del país y de garantizar el proceso electoral, se han mostrado escépticos con el alto el fuego anunciado por los talibanes.
Así, han reconocido que es un anuncio poco creíble porque la insurgencia talibán es una organización terrorista que hoy firma un acuerdo y mañana lo rompe, sin ningún tipo de problema, ha apuntado uno de los soldados.
"No es creíble el alto el fuego; puede deberse a una estrategia electoral para ganar votos", ha dicho el comandante de Infantería, Juan Carlos Fernández, miembro de la ISAF en Kabul.
En este contexto, ha señalado que probablemente los talibanes intenten algún "golpe de efecto", con algún ataque que impacte a la comunidad internacional.
Ha insistido en que los próximos meses, tras las elecciones presidenciales, serán fundamentales para la operación ISAF y para Afganistán.
"Reconstruir este país cuesta muchos años porque los afganos tienen una mentalidad comparable a la que tenía la gente en la Edad Media", ha subrayado.
En la actualidad, España tiene desplegados en este país 1.300 militares, encuadrados en la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (ISAF) de la OTAN, bajo el mando de las Naciones Unidas.
En los siete años y medio de misión, los 12.151 efectivos españoles que se han desplegados en Afganistán en las distintas rotaciones han realizado más de 21.200 patrullas, han recorrido más de 2,3 millones de kilómetros y han realizado más de 1.400 misiones de desactivación de explosivos.
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