Secciones bajar

No hubo interés en la subasta del histórico hotel Watergate

EFE
Actualizado 21-07-2009 23:57 CET

Washington.-  El hotel Watergate, parte del complejo de edificios escenario de la conspiración política que le costó la presidencia a Richard Nixon en 1974, salió hoy a una subasta en la que no se presentaron pujas.

Como resultado, la propiedad fue entregada al único interesado: la empresa acreedora del actual propietario, Monument Realty, que proyectaba restaurarlo a un costo de 170 millones de dólares.

La compañía Alex Cooper sacó el hotel a subasta después de que Monument Realty no pudiera pagar 40 millones de dólares que debía a la financiera PB Capital Corporation.

Fuentes de la casa de subastas inmobiliarias señalaron que el remate comenzó y terminó con una sola oferta, de 25 millones de dólares, presentada por PB Capital.

Paul Cooper, vicepresidente de la casa de subastas, dijo a una emisora local de radio que había 10 firmas que pagaron un millón de dólares cada una para participar en la subasta, pero ninguna presentó una oferta.

El hotel llevaba cerrado desde 2007 y la compañía tenía la intención de reabrir sus puertas a finales de 2009, tras una inversión de 170 millones de dólares.

La idea era mantenerlo como un oasis para millonarios, con tarifas de 2.000 dólares por noche.

Tras verse obligados a vender parte de su mobiliario en 2007 y los objetos marcados con la "W" del emblemático hotel, desde las almohadas hasta los sanitarios, pasando por los escritorios de las habitaciones y las mesillas, no consiguieron los fondos para reabrirlo.

El Watergate abrió sus puertas en 1967 dentro de un complejo de seis edificios de apartamentos y oficinas construido en el centro de Washington, a orillas del río Potomac, y pronto se convirtió en uno de los núcleos de poder más prominentes en la capital de EE.UU.

Podría haber seguido siendo un hotel de lujo más en Washington, pero el nombre Watergate se hizo conocido en todo el mundo en 1972 cuando se produjo un robo en las oficinas que el Comité Nacional Demócrata tenía en el complejo.

El robo no fue un acto de delincuencia común sino que buscaba obtener información confidencial que vinculara al Partido Demócrata con Cuba y pudiera servir como contra-propaganda para conseguir la reelección del republicano Richard Nixon.

Los ladrones se alojaron en las habitaciones 214 y 314, que al igual que el resto de las 251 habitaciones del emblemático hotel permanecen cerradas desde 2007.

The Washington Post, el periódico que destapó el escándalo en los años setenta, adelantó que una cadena hotelera de Oriente Medio podía estar interesada en la compra.

Se calcula que son necesarios cerca de cien millones de dólares para la reparación de los mármoles de ricos colores que dieron un toque exclusivo al hotel y de la exquisita decoración, que ha permanecido estos últimos años bajo una espesa capa de polvo.

En momentos de crisis económica en los que las compañías reducen costes y los huéspedes, aunque sean millonarios, no están para muchos gastos, encontrar cien millones de dólares parece una tarea complicada.

Temas relacionados

Selección de temas realizada automáticamente por Autonomy

Di lo que quieras

Aceptar

Si quieres firmar tus comentarios puedes iniciar sesión »

En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.

Di lo que quieras

Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si ya lo estás registrado puedes iniciar sesión ahora.

Volver a actualidad Volver a portada
subir Subir al principio de la página