Lima.- Perú asumirá mañana la presidencia pro témpore de la Comunidad Andina (CAN) con una nueva agenda estratégica y en medio de lo que el jefe de la diplomacia peruana ha calificado de "serias diferencias" entre los países socios, que son además Bolivia, Ecuador y Colombia.
El canciller peruano, José Antonio García Belaúnde, ha expresado en varias oportunidades que su Gobierno pretende aplicar una "agenda realista" con una nueva visión estratégica que soslaye los temas más polémicos, como los económicos y comerciales, para centrarse en la integración de infraestructura y la cooperación.
La presidencia peruana coincide con la quinta ronda en Lima de negociaciones bilaterales para un acuerdo comercial entre Colombia y Perú con la Unión Europea (UE), una ronda de la que Ecuador se ha desmarcado en el último momento y que Bolivia ni siquiera comenzó por apostar por un diálogo de "bloque a bloque".
La CAN cumplió este año su aniversario número 40 y, pese a ser una de las instituciones supranacionales más antiguas del mundo, ha avanzado muy poco en materia de integración y, de hecho, las diferencias estratégicas e ideológicas son cada vez más evidentes entre sus miembros.
Las distintas visiones sobre el desarrollo marca un abismo entre Colombia y Perú, por un lado, y Ecuador y Bolivia, por otro, situación que el Gobierno de Lima califica como "serias diferencias".
El escenario se complica aún más ya que Quito rompió relaciones diplomáticas con Bogotá tras la incursión militar colombiana en marzo de 2008 contra un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en suelo ecuatoriano.
Mientras, Lima y La Paz están distanciadas por la reciente decisión del Gobierno peruano de otorgar asilo y refugio a tres ex ministros bolivianos, más los repetidos ataques del presidente Evo Morales a su colega Alan García
El Gobierno de García llamó el 15 de junio pasado a consultas a su embajador en La Paz, Fernando Rojas, quien retornó a Lima de forma indefinida.
Los cancilleres de Perú y Bolivia tienen previsto reunirse el próximo viernes en Asunción, en el marco de una cumbre presidencial de Mercosur, para intentar resolver la crisis, lo que facilitará el trabajo de Lima frente a la CAN.
Asimismo, la decisión del Gobierno de Ecuador de suspender las preferencias arancelarias en enero pasado para paliar los efectos de la crisis mundial causó el malestar de sus socios, pero después la Secretaria General del organismo le ordenó restablecerlas a principios de mes.
Otro asunto espinoso es el malestar en Bogotá por otra medida del Consejo de Comercio Exterior e Inversiones (Comexi) de Ecuador para aplicar una salvaguardia cambiaria frente a las importaciones colombianas.
La Secretaría General de la CAN tiene previsto pronunciarse el próximo 6 de agosto sobre la medida planteada por Ecuador el pasado 26 de junio.
Para el traspaso de la presidencia pro témpore de manos de Quito a Lima se espera la presencia del canciller ecuatoriano, Fander Falconí, en la ceremonia que se celebrará en el Palacio Torre Tagle (sede del Ministerio de Exteriores de Perú) y que contará con la presencia del secretario general de la CAN, Freddy Ehlers.
La fecha para el cambio de presidencia fue primero fijado para el pasado 6 de julio, pero se suspendió debido a que el Falconí se encontraba ese día en Washington en una sesión de la Organización de Estados Americanos (OEA) en la que se buscaba una solución a la crisis de Honduras.
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