Toledo.- La Audiencia de Toledo ha condenado a penas de entre 30 y 32 años de cárcel a cada uno de los cuatro atracadores que en enero de 2006 asaltaron con pistolas un chalé en Seseña (Toledo), aunque cada uno de los acusados no podrá pasar más de quince años en la cárcel.
Los hechos juzgados se iniciaron a las 20:20 horas del 14 de enero de 2006 cuando los ahora condenados, en compañía de otros tres individuos que no han sido identificados, asaltaron un chalé, al que accedieron enmascarados y armados con cuatro pistolas y armas blancas y donde maniataron y amenazaron de muerte al matrimonio y a sus tres hijos menores, de entre cuatro y catorce años.
Según la sentencia hecha pública hoy por la sección primera de la Audiencia toledana, a cada uno de los condenados -tres colombianos y un francés, (François Stephane R.D., James Emilio Z.R., José Robert M.O. y Jeferson R.J.)- se les condena a veinticinco años de cárcel por cinco delitos de detención ilegal (cinco años por cada uno de los miembros de la familia).
Además, a cada uno de los procesados se les condena a cinco años de cárcel por un delito de allanamiento de morada, mientras que a dos de ellos, Jeferson y James Emilio, se les condena a dos y un año más de cárcel, respectivamente, por otro delito de tenencia ilícita de armas.
No obstante, el tribunal presidido por Manuel Gutiérrez advierte en la sentencia de que "el máximo de cumplimiento de las penas impuestas no podrá exceder de quince años".
La sala considera probado que el día de los hechos, dos de los asaltantes (Yeferson y James Emilio) accedieron al interior del domicilio aprovechando la llegada del propietario, M.C.O., al que amenazaron con una pistola.
Ya en el interior de la casa, donde se encontraban dos de los hijos del matrimonio, de diez y catorce años, entraron los otros dos asaltantes condenados junto a otros tres individuos que no han sido localizados, todos encapuchados y con otras tres pistolas.
Tras maniatarles y sentarles en el salón, los atracadores insistían en que les dijeran donde estaban el dinero, las joyas y la caja fuerte, todo ello colocando una de las pistolas en la cabeza de uno de los niños bajo amenaza de matarles a todos y mientras uno de los asaltantes propinaba una patada al dueño de la vivienda.
Transcurridos unos cincuenta minutos, durante los cuales los atracadores seguían con sus amenazas mientras comían jamón y bebían coca cola, llegó al chalé la madre de familia con su hijo menor de cuatro años, que corrieron la misma suerte.
De la vivienda los asaltantes se llevaron muchos objetos y joyas por un valor cercano a los ocho mil euros, así como 370 euros en metálico.
Tras su detención, se registraron las viviendas de los asaltantes, donde hallaron entre otras armas, una escopeta con el cañón y la culata recortados y una pistola, armas para las que no tenían licencia, además de munición y dinero en metálico.
La fiscalía solicitó para cada uno de los encausados penas de entre los 37 y los 35 años de cárcel.
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