Santiago de Compostela.- El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha destacado hoy que la importancia del acuerdo alcanzado ayer sobre las infraestructuras en Galicia radica en que quedará fijado por escrito lo que hay que hacer a partir de este mismo año y hasta 2015.
Núñez Feijóo indicó en la conferencia de prensa posterior a la reunión semanal del Ejecutivo gallego que, según el acuerdo alcanzado ayer con el responsable de Fomento, José Blanco, que deberá ser ratificado en las próximas semanas, hasta el 31 de diciembre de 2010 el Gobierno deberá "licitar, adjudicar y contratar más de 4.600 millones de euros".
De este modo, explicó el presidente gallego, tanto la conexión por tren de alta velocidad con la Meseta como la unión entre las principales ciudades gallegas así como la frontera con Portugal queda "blindada", ya que una vez licitadas, adjudicadas y contratadas las obras, las empresas querrán cumplir los plazos para cobrar.
Según Núñez Feijóo, la "diferencia sustancial" entre 2012, la fecha anterior comprometida por el mismo Ejecutivo socialista y 2015, es que ahora hay presupuesto y un acuerdo por escrito para saber qué es lo que hay que hacer cada año, mientras que antes había una fecha de finalización que no estaba respaldada presupuestariamente.
Los próximos pasos serán informar a los grupos de la Cámara del acuerdo, firmarlo con el ministro y comenzar a "plasmar las obras en el mapa gallego", según dijo
"Lo más importante es que hay más de 4.600 millones para licitar, adjudicar y contratar en los próximos 18 meses", concluyó.
El presidente gallego se mostró convencido de que el "éxito" logrado ayer es de "todos los gallegos y de todas las fuerzas políticas y sociales".
"No hay autorías, hay un esfuerzo colectivo hecho en los últimos años para conseguir este acuerdo", señaló Núñez Feijóo, que indicó que serán próximos gobiernos los que pongan en marcha el tren de alta velocidad.
Según Núñez Feijóo, el acuerdo con el Ministerio de Fomento supone un "cambio" en como deben ser las relaciones institucionales entre la Xunta y el Gobierno basadas en la "lealtad recíproca, en la realidad de los hechos y en los acuerdos productivos".
Para el titular de la Xunta, la importancia del acuerdo radica en que "por primera vez" hay un compromiso por escrito con una fecha "cierta" en el que se adjudica, se licita y se contrata la totalidad de la obra, esto es, "la vía, la plataforma, la catenaria y el sistema de seguridad".
En el tramo Vigo-Ourense la Xunta ha propuesto que se licite conjuntamente el proyecto y la obra, por lo que habrá una concesión administrativa igual que la existente en el tramo Cataluña-frontera francesa, ya que este tramo está "muy retrasado", según dijo.
Una vez firmado el acuerdo se reunirá la comisión de seguimiento con carácter cautrimestral, según explicó Núñez Feijóo, que manifestó, además, que ha propuesto al ministro que la oposición en Galicia forme parte de dicha comisión.
En cuanto al resto de la reunión mantenida con Blanco, el presidente gallego destacó la disponibilidad del Ministerio a transferir a Galicia la autopista AP-53.
Sobre la AP-9 no habrá transferencia mientras "no esté claro definitivamente" la ampliación en Santiago, en el puente de Rande y los accesos a A Coruña, así como una decisión sobre la autovía libre de peaje entre Pontevedra y Vigo.
Además, sobre el puerto exterior de A Coruña habrá una reunión específica para tratar los "problemas de financiación".
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