Santiago de Compostela.- Los diputados de los grupos parlamentarios del PSdeG y del BNG, excepto Ricardo Varela (PSdeG) que forma parte de la Mesa, han abandonado hoy el pleno del Parlamento, como protesta a una intervención del conselleiro de Economía e Industria, Javier Guerra.
Tras responder a una pregunta oral sobre la empresa textil Caramelo, el conselleiro pidió la palabra por "alusiones" hechas a sus empresas durante la sesión de control al Gobierno de esta mañana, en las que el portavoz del BNG, Carlos Aymerich, criticó que la producción de sus empresas se hiciera en Portugal.
La presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, concedió el turno de palabra, lo que provocó las protestas del portavoz del PSdeG, Xaquín Fernández Leiceaga y del propio Aymerich, que se unieron a los gritos del público, empleados de Caramelo, que estaban siendo desalojados por llamar "mentiroso" al conselleiro.
Guerra indicó, en su intervención, que sus empresas generan valor en Galicia, a pesar de producir fuera y enseñó al aire los papeles copia del impuesto de sociedades de sus empresas que así lo demuestran, según dijo.
Además, el titular de Economía e Industria calificó de personas "anticuadas en su ideología" a quienes criticaron sus empresas.
Mientras pronunciaba estas palabras, desde los escaños de la oposición gritaban que era una "vergüenza" por entender que Guerra estaba hablando como empresario y no como miembro del Gobierno y que estaba haciendo "defensa de sus empresas".
La presidenta del Parlamento pidió calma y recordó que es a ella a quien compete dar la palabra, "independientemente de que la respeten".
Cuando tuvo la palabra, Aymerich denunció que a su juicio, en aplicación del reglamento, al conselleiro no le correspondía el turno de palabra y, por otra parte, señaló que al BNG lo que le interesa es que se creen puestos de trabajo en Galicia y no que "gente como usted", en alusión al conselleiro, "se beneficie de la destrucción de puestos de trabajo en Galicia".
Fernández Leiceaga (PSdeG) agradeció al conselleiro la defensa de sus empresas, ya que de ese modo su grupo "tomará nota" para que explique, en su condición de miembro de la Xunta, cómo va a conceder subvenciones a empresas que hacen la competencia a las suyas.
Tras estas palabras los diputados socialistas se levantaron y se marcharon del hemiciclo, a los que siguieron los diputados del BNG.
Momentos antes, durante la intervención del conselleiro, el diputado del BNG Bieito Lobeira se levantó y se marchó quejándose de que Guerra estaba "defendiendo sus empresas", lo que era una "vergüenza".
Una vez abandonaron el hemiciclo, Rojo indicó que las alusiones las valora la Presidencia y señaló que su labor es garantizar que "todo el mundo pueda hablar".
El portavoz del PPdeG, Manuel Ruiz Rivas, recordó que "no es la primera vez" que los grupos de la oposición abandonan la institución para la que fueron elegidos.
Antes durante el debate de la situación de Caramelo, el conselleiro de Economía en Industria afirmó que el anterior Ejecutivo supo en diciembre de 2008 que la empresa tenía intención de presentar un ERE y "no hizo nada" a pesar de concederle "30,5 millones de euros sin garantías de viabilidad".
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