Finestrat (Alicante).- El Ayuntamiento de Finestrat ha iniciado hoy los trámites para la declaración de ruina del edificio Ánfora, situado en primera línea de la playa, ante "la falta de movimiento e información" por parte del Ministerio de Medio Ambiente sobre el expediente de expropiación forzosa.
Según ha explicado el alcalde, Honorato Algado, en nueve o diez meses se estará en disposición de derribar el edificio, una vez se elabore el expediente y se le comunique a los propietarios.
Según el alcalde, desde el pasado enero han recibido siempre "la misma" información desde la Dirección Provincial de Costas: Que el asunto "está en Intervención y que se están revisando los expedientes".
Esta misma mañana el Ayuntamiento se ha vuelto a poner en contacto con Costas, con el mismo resultado.
Algado ha recordado que el pasado octubre se alcanzó un acuerdo entre la administración central, el ayuntamiento y los dueños para proceder a la expropiación forzosa y el derribo del edificio en enero.
En base a este acuerdo, se fijaron "unas indemnizaciones" para los propietarios de alrededor de dos millones de euros, de los cuales el Ayuntamiento se hacía cargo de 460.000 euros, en caso de que la Dirección General de Costas hubiera dado pasos.
El alcalde ha detallado que la declaración de ruina implica que serán los propietarios quienes "asuman el coste" del derribo que ronda aproximadamente los 180.000 euros.
No obstante, ha afirmado desconocer si los propietarios tendrán derecho a percibir las indemnizaciones pactadas, ya que el expediente de expropiación forzosa sigue abierto.
Algado ha justificado la declaración de ruina explicando que existen informes de técnicos municipales que detallan el acusado deterioro del edificio y "el riesgo" que comporta.
Ha comentado que las lluvias del pasado invierno han causado filtraciones en el techado e, incluso, en las viviendas colindantes, y se ha detectado el debilitamiento de las vigas y los pilares.
Según el alcalde, los efectos del temporal de viento del pasado enero también causaron daños que obligaron a ampliar la zona de seguridad del edificio, por desprendimientos.
Además, ha indicado que, con el derribo, desde el ayuntamiento se quiere garantizar la salubridad de la zona y la seguridad de las personas, ya que alrededor del edificio se han detectado la proliferación de excrementos de diversos animales, así como la presencia de "ocupas" que han tenido que ser desalojados del interior del inmueble por la policía local.
Algado ha indicado que el ayuntamiento "no está dispuesto" a pasar otro invierno poniendo "en peligro" a los viandantes ni a que se pueda dar una situación de colapso de la estructura.
El alcalde ha indicado que "ojalá" el Ministerio agilice el expediente de expropiación y la demolición.
Desde el Ayuntamiento ya se comunicó "hace dos o tres meses" que se iba a esperar un tiempo prudencial, hasta "el verano", antes de proceder a iniciar el expediente de declaración de ruina.
El edificio Ánfora se empezó a construir en el año 1963, pero no se concluyó, por lo que quedó en el estado actual desde finales de la década de los setenta, "afeando la imagen de La Cala de Finestrat".
El inmueble cuenta "con cinco o seis propietarios afectados", si bien la mayoría están hipotecadas o en mano de los bancos.
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