No existen muchos precedentes de la desaparición de un avión, como ha ocurrido con el vuelo AF447 de Air France, cuyo rastro se perdió sobre el Océano Atlántico mientras cubría la distancia entre Río de Janeiro y París, con 228 pasajeros a bordo. Teniendo en cuenta la avanzada tecnología que precisa un avión, es inevitable preguntarse cómo es posible que pueda perderse su rastro por completo.
Según nos explica Rafa López, miembro de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), cuando se realiza un control transoceánico hay muchas zonas en las que no hay cobertura de radar. Son zonas negras que se extienden a partir de unas 150 millas de distancia de la costa, como aquella en la que se produjo la desaparición de la aeronave de Air France.
En esos casos, cuando el radar no responde, la posición de los aviones se controla a través de los informes de posición que va dictando el piloto. Normalmente, estas comunicaciones se emiten cada hora, si bien el piloto tiene la posibilidad de establecer contacto en cualquier momento si es que hubiera algún tipo de necesidad. Eso sí, las comunicaciones son bastante precarias, hasta el punto de que se oye como si alguien estuviera "friendo un huevo", según reconoce un piloto.
Los controladores también tienen la posibilidad de ponerse en contacto con un avión concreto en el momento que sea necesario. Para ello emiten una "llamada selectiva" (selcall), que permite, desde el control, comunicarse con un avión determinado a través de un código concreto que recibe esa única nave.
En el caso francés, la última comunicación directa por voz entre el vuelo AF447 y los controladores aéreos, según la información disponible, se produjo hacia las 3.30 de la madrugada, hora española, y anunciaba "fuertes turbulencias". A partir de entonces ya no hubo más intercambio de información directa.
Únicamente, algo más tarde, se recibió un mensaje automático desde el avión, que informaba acerca de "un fallo en el circuito eléctrico lejos de la costa", según señaló la compañía del avión siniestrado. Estos mensajes automáticos se transmiten en algunas aeronaves a través de un sistema que se conoce genéricamente como 'datalink', y que, normalmente, envía mensajes automáticos a la compañía a la que pertenece el avión cuando se produce algún tipo de fallo, lo que queda registrado y facilita las labores de mantenimiento.
Los aviones tienen, igualmente, en caso de emergencia, la posibilidad de emitir a través de una frecuencia de emergencia que llega a todas las aeronaves, de modo que puedan escuchar las llamadas de auxilio. Todos los aviones tienen acceso a esta frecuencia.
Existe la posibilidad de que todos los sistemas de comunicación registren algún fallo y que se pierda completamente el contacto con los controladores o con la propia compañía. En ese caso existe un protocolo fijado que los pilotos han de seguir. Y, entre otros aspectos, prevé retomar el plan original de vuelo, aquél que se había fijado antes de su salida y que los controladores ya conocen, de modo que puedan tener una idea de por dónde está viajando la nave. Sin embargo, es imposible que suceda esto en la caso de Air France, ya que el avión habría agotado completamente a estas alturas su combustible y ya habría llegado a su destino original.
Rafa López habla de que una emergencia súbita podría haber sido la causa de que no hubiera habido tiempo suficiente para informar de los problemas, según se desprende de los datos hasta ahora disponibles, en el siniestro del vuelo AF447 de Air France.
Pero si todos los sistemas efectivamente fallaran, o no hubiera tiempo de activarlos, y se hubiera producido un accidente, los aviones también están equipados con un sistema que permite su localización y que se conoce como 'radiobaliza de emergencia' (o ELT, por sus siglas en inglés). Este mecanismo se activa en caso de accidente, en el momento de sufrir un fuerte impacto, y emite también en frecuencia de emergencia, lo que permite que las señales sean escuchadas por otras naves que transitan la zona, de modo que éstas puedan avisar acerca de un posible suceso.
No se tiene constancia de que esto haya ocurrido en el caso del avión desaparecido de Air France. Estas balizas suelen estar bien protegidas, certificadas para superar altas temperaturas y cierta profundidad, aunque no son del todo infalibles. Existe la posibilidad de que el avión, en el caso de haber sufrido un accidente contra el océano, se hubiera hundido a mucha profundidad —en la zona donde se cree que ocurrió la catástrofe se alcanzan los 4.000 metros—, por lo que las balizas perderían su efectividad y podrían llegar a perder su capacidad de transmitir.
Otro factor que influye mucho en la invisibilidad del aparato es el hecho de que se le haya perdido el rastro en alta mar. Y es que, si el posible accidente hubiera ocurrido en tierra firme la visibilidad sería mucho mayor, entre otras cosas, por la cortina de humo, según nos explica Rafa López. Además, el océano está en constante movimiento, lo que hace que el avión pueda haberse desplazado mucho desde el lugar en el que presumiblemente sufrió el siniestro.
Se ha hablado de que una fuerte tormenta ha podido ser la causa de la desaparición. Sin embargo, los aviones tienes sistemas meteorológicos que permiten sortear las zonas en las que se concentran grandes inestabilidades atmosféricas. Del mismo modo, se ha dicho que un rayo podría haber causado el accidente, si bien éste es un extremo que muchos expertos han descartado, porque los aviones están preparados para este tipo de impactos y además sufren el efecto conocido como 'Jaula de Faraday' (al ser metálica la estructura del aparato, ésta se convierte en conductora de la electricidad y evita que la carga eléctrica entre dentro del avión).
Los pilotos consultados coinciden en que no es recomendable especular sobre las causas de la desaparición hasta que no haya un mayor volumen de información disponible. Por tanto, recomiendan esperar al hallazgo de la nave y de sus cajas negras (hay dos cajas de este tipo: la que registra los parámetros del avión —tales como la altitud, la velocidad y la actividad de los motores, entre otras cosas— y la que registra las voces en cabina). También prefieren esperar los resultados del informe oficial de la comisión de accidentes, aunque todo esto resultaría en vano si no llegan a encontrarse restos del aparato.
Si quieres firmar tus comentarios puedes iniciar sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si ya lo estás registrado puedes iniciar sesión ahora.