Caracas.- El Gobierno venezolano negó hoy que los intereses argentinos estén "amenazados" en el país a raíz del proceso de nacionalizaciones en marcha, y reiteró su apoyo "solidario y desinteresado" al Gobierno y pueblo argentinos.
En un comunicado, la Cancillería venezolana aclaró que el plan nacionalizador que aplica desde 2006 abarca sectores estratégicos fundamentales de la economía venezolana, "independientemente de la nacionalidad de los capitalistas involucrados".
El pronunciamiento venezolano ocurrió un día después de que la presidente argentina, Cristina Fernández, pidiera explicaciones a su colega venezolano, Hugo Chávez, por informaciones de prensa según las cuales su Gobierno ha excluido a empresas brasileñas de su plan nacionalizador, que ha afectado al grupo argentino Techint.
Un despacho de la agencia oficial de noticias argentina Télam indicó hoy que Fernández llamó este martes por teléfono a Chávez, quien le negó tales informes periodísticos por lo que la mandataria le pidió "un desmentido público".
En su comunicado, la Cancillería venezolana denunció que "algunos medios argentinos han desatado una feroz campaña de difamación" contra Venezuela "con la intención de hacer creer al pueblo argentino que (...) los intereses argentinos estarían amenazados" en este país.
Esa supuesta campaña buscaría "tergiversar los motivos que condujeron a la decisión soberana y legalmente tomada por el Gobierno venezolano de nacionalizar varias empresas del sector siderúrgico, algunas de las cuales fueron parcialmente propiedad del grupo argentino Techint", señaló el comunicado oficial.
"El procedimiento adoptado e implementado" para la estatización de las cinco empresas siderúrgicas, especializadas en la producción de briquetas, "garantiza a esta empresa (Techint) la justa y pronta indemnización por los activos que ahora vuelven a ser propiedad del pueblo venezolano", añadió la Cancillería.
Chávez anunció el pasado 21 de mayo la nacionalización de una empresa de cerámica y otras cinco siderúrgicas, entre ellas Tavsa y Matesi, en las que Techint tiene mayoría, y el Complejo Siderúrgico Guayana, en la que el grupo argentino es accionista minoritario.
Esa decisión venezolana causó sorpresa y malestar en Techint, y también en la Unión Industrial Argentina (UIA), la mayor entidad empresarial del país, que reclamó que se revise el visto bueno al ingreso de Venezuela en el Mercosur por la política de nacionalizaciones de Chávez.
Techint pactó a inicios de este mayo con el Gobierno de Chávez el cobro de 1.970 millones de dólares por el traspaso al Estado venezolano de la Siderúrgica del Orinoco (Sidor), nacionalizada en 2008.
La presunta campaña mediática argentina contra Venezuela incluye el intento de "manipulación" de unas afirmaciones de Chávez este martes, durante una reunión de trabajo con su colega brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, en las que "llegó a bromear" y dijo que Venezuela pasaba por una fase de "nacionalizaciones, menos de las empresas brasileñas", según el comunicado.
El Gobierno venezolano "ratifica todo su respeto y su confianza (...) por los empresarios argentinos, con quienes nos une una relación estrecha y de trabajo productivo", indicó el comunicado oficial, después de rechazar el "intento de manipulación" mediática de las declaraciones hechas por Chávez ayer en Brasil.
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