Bogotá.- La construcción de cuatro nuevos campos militares por parte de Ecuador en su frontera norte impedirá la existencia de "santuarios" de las FARC en la zona y dará mayor "tranquilidad" a los habitantes, dijo hoy el secretario de gobierno del colindante departamento colombiano de Nariño, Fabio Trujillo.
En declaraciones a la emisora colombiana La FM, Trujillo confirmó que hay "muchísima" presencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en los cerca de 200 kilómetros de frontera que separan Nariño con Ecuador.
"Nos parece muy positivo que un país cuide sus fronteras y es muy bueno que esto ocurra, porque muchas de las persecuciones que hace el Ejército colombiano a las FARC terminan en la frontera, no pueden pasar más allá", manifestó.
Trujillo agregó que a las autoridades y pobladores de esa región les da "mucha tranquilidad" la decisión del Gobierno de Ecuador de levantar cuatro nuevos campamentos, "porque si este país cuida sus fronteras la seguridad va a mejorar para los habitantes de Nariño".
El secretario de gobierno subrayó que si existe mayor protección del otro lado de la frontera se redundará en la mejora de la seguridad para todos.
"La frontera es muy selvática, sin acceso de vehículos por el lado colombiano, entonces es usada como zona de descanso de las FARC, es un corredor importante para el paso de mucha gente y material", advirtió.
También explico que el ataque de las FARC a una patrulla militar el pasado sábado, con el resultado de siete soldados muertos en el municipio de Samaniego, no ocurrió en la misma frontera, pero sí en una zona de influencia de los rebeldes en esa región.
El ministro ecuatoriano de Defensa, Javier Ponce, anunció el domingo que su país construirá este año cuatro campamentos en su frontera con Colombia para reforzar el control y la seguridad, e impedir el ingreso de grupos armados ilegales.
Ponce dijo que uno de los objetivos de la Defensa Nacional ecuatoriana es mejorar y "garantizar la integridad territorial".
En el lado colombiano de la frontera amazónica operan las FARC, así como grupos paramilitares y narcotraficantes, mientras que en la zona costera que une a los dos países se ha detectado la presencia también de la denominada "Águilas Negras", una banda de delincuentes ligada a paramilitares.
Además del reforzamiento en hombres y destacamentos militares, Ponce recordó que el plan de seguridad en la frontera incluye la incorporación de nuevos equipos de vigilancia, como radares de origen chino.
El Gobierno de Quito rompió sus relaciones diplomáticas con Bogotá en marzo de 2008 tras un bombardeo del Ejército colombiano a un campamento de las FARC en territorio ecuatoriano que acabó con la vida de una veintena de personas, entre ellas, el número dos de esa guerrilla, Luis Edgar Devia, alias "Raúl Reyes".
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