Islamabad.- Al menos 45 integristas murieron hoy en operaciones de las fuerzas de seguridad paquistaníes en diferentes áreas del valle de Swat, en el norte del país, informó el mando militar, que acusó a los insurgentes de causar víctimas civiles.
En un comunicado, el Ejército afirmó que 15 integristas perdieron la vida en ataques con helicópteros contra refugios de la insurgencia en las cercanías de Mingora, la principal población del valle, donde los talibanes llevaron a cabo varios saqueos.
Las fuerzas de seguridad mataron entre 30 y 40 talibanes en ataques en otras áreas de Swat y destruyeron el principal cuartel de la insurgencia, situado en la zona de Matta.
La comandancia paquistaní acusó a la insurgencia de haber causado la muerte de varios civiles, aunque no aportó cifras.
"El fuego indiscriminado de mortero de los militantes en áreas pobladas de Mingora ha causado la muerte de civiles", reza el comunicado, que agrega que los integristas "están utilizando las viviendas de civiles como búnkeres para atacar a las fuerzas de seguridad".
El Gobierno paquistaní dio el pasado jueves por roto el acuerdo de paz alcanzado entre las autoridades provinciales y los talibanes de Swat el pasado febrero y ordenó al Ejército una nueva ofensiva contra los extremistas en el valle, en conflicto desde verano de 2007.
Antes de suspender formalmente la tregua, las fuerzas de seguridad ya habían iniciado ofensivas en Swat, donde más de 200 talibanes han muerto en tres días, según la versión militar.
Las tropas también han lanzado operaciones en los distritos vecinos de Dir y Buner, este último a 100 kilómetros de Islamabad, donde los insurgentes penetraron en abril.
Según el Ejército, las tropas también atacaron hoy a los integristas en el distrito de Shangla (al este de Swat), donde causaron "numerosas bajas".
Al menos 4 soldados resultaron heridos en los enfrentamientos registrados en estas demarcaciones.
Las operaciones del Ejército contra los extremistas han provocado un éxodo masivo de ciudadanos hacia zonas más seguras.
Por el momento, las autoridades estiman en al menos 200.000 el número de desplazados.
El primer ministro paquistaní, Yusuf Razá Guilani, reiteró hoy que la operación militar contra la insurgencia talibán continuará hasta acabar con el "terrorismo".
Tras una reunión especial con los miembros de su Gabinete, Guilani anunció además una ayuda para los desplazados de 200 millones de rupias (2,5 millones de dólares) que se sumarán a los 1.000 millones de rupias (12,5 millones de dólares) prometidos hace dos días.
Sin embargo, el ministro de Información de la Provincia de la Frontera del Noroeste (NWFP), Mian Iftikhar, calificó hoy de "insuficiente" la ayuda, en unas declaraciones recogidas por el canal privado "Express TV".
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