Bogotá.- La congresista colombiana Piedad Córdoba dijo hoy en Bogotá que las fronteras con Ecuador o Venezuela también pueden acoger la zona neutra binacional que ha propuesto como sede para la negociación de un acuerdo sobre rehenes entre el Gobierno de su país y la guerrilla de las FARC.
La sugerencia supone la ampliación de la iniciativa original de la misma legisladora de que algún lugar de los límites de Colombia con Brasil les sirva a ambas partes para buscar el consenso al que los rebeldes condicionan la puesta en libertad de 22 secuestrados.
"Esto lo planteé en Brasil", dijo Córdoba, al recordar a la prensa en Bogotá que la propuesta inicial sobre una zona binacional la presentó durante la visita que hizo esta semana al país vecino, donde se entrevistó con el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, entre otros funcionarios.
La parlamentaria, que lidera el colectivo de intelectuales Colombianas y Colombianos por la Paz (CCP), viajó a Brasilia para ver si Brasil está dispuesto a facilitar nuevos apoyos logísticos para la recepción de secuestrados por las FARC.
El Gobierno brasileño facilitó el pasado febrero dos helicópteros para las misiones humanitarias que recibieron a seis rehenes que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) liberaron de manera unilateral.
Además de Brasil, el área neutra "puede ser una zona con Ecuador, que ayudaría enormemente para que Colombia restablezca las relaciones con este país (rotas por Quito en marzo de 2008)", consideró Córdoba, opositora al Gobierno de Álvaro Uribe.
Asimismo, "puede ser una zona con Venezuela, que también es un país que tiene una frontera inmensa, o puede ser Brasil", añadió la congresista, a quien las FARC se han propuesto entregar a Pablo Emilio Moncayo, uno de los dos rehenes que llevan más tiempo en manos de los guerrilleros.
El cabo Moncayo fue secuestrado junto al también cabo Libio José Martínez en diciembre de 1997 durante un cruento ataque a una base de comunicaciones del Ejército en Nariño, departamento de la frontera sur con Ecuador.
En un mensaje divulgado el pasado 16 de abril, las FARC informaron de su decisión de entregar al militar a una misión encabezada por Córdoba y el padre del rehén, el profesor de colegio Gustavo Moncayo.
Sin embargo, Uribe advertió que sólo autoriza al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y a la Iglesia católica para que asuman la operación humanitaria.
La participación de estas dos partes fue considerada insuficiente hace dos días por los rebeldes, que en un mensaje público reclaman la presencia de la congresista y del padre del militar.
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