Aguilar dice 'sí' a la Junta de Andalucía, después de su 'no' a Izquierda Unida

"Yo tengo un compromiso de cuatro años con Córdoba". Ésa fue la respuesta que dio Rosa Aguilar a televisiones, radios y periódicos que durante el año pasado por estas mismas fechas le preguntaban por su posible candidatura para coordinar Izquierda Unida —que se había quedado con un sólo representante en el Congreso—. Ahora el 'no' a su formación se ha convertido en un 'sí' al socialista José Antonio Griñán, nuevo presidente de la Junta de Andalucía, que se lleva a su Gobierno a un 'verso suelto' de la izquierda.

• 6 de abril de 2008. Diario de Córdoba. "En todas las campañas electorales se habla de que Rosa Aguilar se va de Córdoba y de que me muero. El día que me hagan una propuesta formal, Rosa Aguilar la meditará [...] Tengo un compromiso de cuatro años con Córdoba. Si en cualquier momento, alguna cuestión pudiera alterar ese compromiso, sería la primera en dar una explicación clara y veraz a la sociedad".
• 26 de mayo de 2008. Canal Sur. "Yo le puedo asegurar que no será Rosa Aguilar candidata a dirigir IU. Yo tengo un compromiso con Córdoba. Un trabajo que estamos realizando en el que yo he puesto mucho empeño, mucho tesón, mucha ilusión y mucha pasión. Todo eso me lo levanta mi ciudad y quiero culminar ese trabajo".
• 12 de noviembre de 2008 Público. "No me gusta hablar a muchos años vista. Mi futuro está en Córdoba. Tengo un compromiso con mi ciudad hasta 2011. Lo mantendré, lo tengo clarísimo".

Que la situación de Rosa Aguilar dentro de su formación no era cómoda no pasaba desapercibida para nadie. Ella no es de las políticas que se muerda la lengua. Criticó con dureza a sus compañeros vascos por gobernar con ANV; no ocultó que había dado su voto en las últimas elecciones generales a la candidata socialista para el Senado; o que desencantada con la dirección del Partido Comunista había decidido no pagar las cuotas y darse de baja del partido en el que militaba desde 1974.

Compañeros de siglas que cargan contra Aguilar

El nombramiento de Aguilar como nueva consejera del Gobierno andaluz que preside desde hoy José Antonio Griñán —tras diecinueve años de hegemonía de Manuel Chaves— ha sorprendido a sus compañeros andaluces. Hace una semana, el coordinador general de Izquierda Unida en Andalucía, Diego Valderas, aseguraba que los elogios lanzados por la alcaldesa de Córdoba al entonces candidato Griñán había que enmarcarlos en la amistad entre ambos, y que "quien los sitúe en otro terreno es que no conoce a Rosa, ni sabe el amor que ésta siente hacia su ciudad".

No sabemos si Valderas conoce mucho o poco a Aguilar. Pero otros compañeros que han compartido con ella años de trabajo no han aplaudido el paso dado por ésta. Gaspar Llamazares le ha tachado de "desleal" con el proyecto de la formación; Cayo Lara ha manifestado su "tristeza, pero nada más", pues a su entender, "es una más de esta bandada de patos inmensa que es Izquierda Unida"; Julio Anguita, compañero durante años en el Congreso y predecesor en el bastón de mando de la ciudad de las tres culturas, considera que su incorporación "le resta credibilidad".