Berlín.- Alemania se ha impuesto a sí misma la obligación de ganar mañana a domicilio ante Gales para mantener la ventaja de cuatro puntos que tiene sobre el segundo del grupo, Rusia, que tiene un partido menos.
En principio, por clase y por historia, un triundo alemán ante Gales sería algo obvio pero en los últimos partidos el equipo de Joachim Löw ha venido mostrando debilidades que generan alguna preocupación entre los observadores.
La goleada por 4-0 lograda ante Liechtenstein no fue más que un ejercicio obligatorio sin ritmo que no alcanza para hacer olvidar las derrotas en los últimos dos amistosos ante la modesta Noruega y ante una Inglaterra llena de bajas.
Además, antes de la goleada ante Liechtenstein, en la eliminatoria Alemania ya había tenido problemas ante Finlandia en Helsinki, donde consiguió con dificultades un empate a tres goles.
El goleador de aquel partido fue Miroslav Klose, que marcó los tres goles alemanes, y mañana Löw no podrá contar con él. Klose tiene una lesión en el pie derecho y es baja.
El sustituto de Klose, según lo ha anunciado ya Löw públicamente, será Mario Gómez, pese a que al jugador del Stuttgart parece pesarle demasiado la camiseta de la selección con la que normalmente no llega a tener el rendimiento que suele mostrar en la Bundesliga.
Gómez no marca desde hace un año con la selección y en el partido contra Liechtenstein -que hubiera sido una gran ocasión para acabar con la sequía- desperdición varias oportunidades buenas y en otra no lo acompañó la suerte al estrellar un disparo contra el larguero.
Pese a ello, Löw ha decidido insistir en él confiado en que tarde o temprano se romperá la maldición y el Gómez de la selección empezará a parecerse al Gómez del Stuttgart.
En principio, es de esperar que Alemania repita la alineación que uso contra Liechtenstein. Piotr Trochowski, que fue baja, está otra vez a disposición de Löw pero Marcell Jansen, que jugó en su posición, marcó un gol y generó varias posibilidades y todo indica que se le dará una segunda oportunidad.
Gales, después de perder en casa por 2-0 ante Finlandia, vio destrozadas prácticamente sus esperanzas de pelear por el segundo lugar del grupo y llega al duelo contra Alemania a jugarse los restos.
De momento, las críticas llueven sobre el seleccionador John Toschack a quien se le acusa de practicar un fútbol excesivamente defensivo y cuyo esquema con un sólo hombre en punta es visto con malos ojos en su país.
Ante Alemania, es posible que Toschack opté por darle cabida a un segundo delantero que sería Bob Earnshaw
Alineaciones probables:
Gales: Hennesey; J Collins, Nyatanga, Bale; S.Davies, Ricketts, Ramsey; Gunter, Koumas; Bellamy y Earnshaw.
Alemania: Enke; Beck, Mertesacker, Tasci, Lahm; Schweinsteiger, Ballack, Hitzlperger, Jansen; Gómez y Podolski.
Arbitro: Hauge (Noruega)
Estadio: Millenium de Cardiff.
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