Madrid.- El Real Madrid acusó el cansancio de la Euroliga y perdió en Las Palmas ante un Gran Canaria que volvió a hacerse fuerte en su pista, mientras que Tau y Barcelona, con prórroga, ganaron y el Cajasol dio otro paso hacia la salvación.
Ni Felipe Reyes ni Louis Bullock pudieron, esta vez, salvar a su equipo. El cansancio, los viajes, el cuarto partido en ocho días, pasó factura al equipo de Joan Plaza, que perdió con justicia al jugar a trompicones y sin concentración.
Si mediado el tercer cuarto el Real Madrid había metido dos triples y el autor había sido Jeremiah Massey, los problemas tenían que estar cerca. El Madrid se hundió en el tercer cuarto pero pudo haber ganado el partido, aunque luchó más por inercia que por convicción.
Los dos partidos de Atenas ante el Olympiakos, contra el que repetirán el próximo martes en Vistalegre, pasaron factura.
En los mismos términos de cansancio, el Barcelona venció al Unicaja, tras un gran partido y después de una prórroga. Los azulgrana parecen haberse abonado a los tiempos extra y si la semana pasada jugaron cuatro sin premio ante el Ricoh Manresa, ahora una fue suficiente, tras once puntos de Navarro, para ganar al Unicaja.
Si hay un equipo capaz de aguantar este ritmo es el Barcelona, al tener el banquillo más profundo y con mayor calidad del continente. El Tau, tuvo que hacer menos esfuerzos para ganar a un Murcia, que no levanta cabeza.
Tau y Barcelona se verán las caras a partir del martes en el tercer partido de cuartos de final de la Euroliga, con continuidad el jueves en el cuarto enfrentamiento.
El que sí levanta cabeza es el Cajasol sevillano. Ha costado tiempo y dinero, pero por fin parece que el equipo comienza a rendir. Lo que está claro es que Clay Tucker, autor esta semana de 37 puntos, es el auténtico forjador del cambio.
Bruesa y Estudiantes también han dado un paso al frente. Los donostiarras estaban complicándose la vida en exceso, tras los últimos resultados y la victoria en Zaragoza, les alivia tanto como daña al CAI que se mete en problemas serios. Estudiantes, tras vencer al Ricoh Manresa, pone tierra de por medio con el descenso con dos victorias de diferencia que le saben a gloria.
El Pamesa volvió a dar otra muestra más de irregularidad, lo mismo que el iurbentia. Los dos equipos son capaces de lo mejor y de lo peor de una semana a otra, En esta les tocó caer ante el Cajasol en casa y el DKV en Badalona, respectivamente, dando la de arena.
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