Málaga.- El Ministerio de Medio Ambiente ha exigido hoy a los empresarios que adapten los chiringuitos ubicados en el litoral andaluz a la Ley de Costas después de que el sector y el PSOE malagueño pidieran "flexibilidad" a este departamento en la aplicación de la normativa.
El secretario general del Mar, Juan Carlos Martín Fragueiro, ha dicho hoy a los periodistas que "la posición del Gobierno es clara", y ha recordado las sentencias de la Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo que "avalan la posición del Ministerio".
Martín Fragueiro, que se ha reunido hoy con los subdelegados del Gobierno de Málaga, Granada, Almería, Cádiz y Huelva, para abordar la situación de las playas, ha mostrado su disposición a trabajar "con todos los sectores afectados" con el objetivo de "llegar a una fotografía final de la situación de los chiringuitos con el respeto a la ley".
Asimismo, ha destacado el papel que desempeñan los ayuntamientos en esta cuestión como "concesionarios de las concesiones administrativas otorgadas por la administración del Estado", por lo que deben "velar por el estricto cumplimiento de la ley".
"En municipios como el que nos encontramos (Málaga), de excelencia turística, la masificación de nuestras playas es de todos conocida", ha señalado Martín Fragueiro, quien ha abogado por compatibilizar el disfrute del dominio público por parte de los ciudadanos con la pervivencia de "aquellas actividades que respeten la ley".
El objetivo sería "ubicar o reubicar" en colaboración con los ayuntamientos las instalaciones que no se ajustan a la normativa, ha explicado el secretario general de Costas, quien ha negado que esta exigencia sea "un ultimátum", tras lo que se ha referido a la demanda social de que se cumplan las leyes.
Las exigencias del Ministerio de Medio Ambiente afectan a la ubicación de estos establecimientos, que demanda fuera de la superficie de la playa, al tiempo que establece límites de ocupación, así como la distancia entre los locales, medidas con las que los hosteleros temen la desaparición de las instalaciones.
En Andalucía hay unos 2.000 chiringuitos que emplean a 40.000 personas y facturan unos 500 millones anuales, según los datos de la Federación Andaluza de Empresarios de Playas.
Su presidente, Norberto del Castillo, ha afirmado hoy a Efe que no pretenden eludir la ley, pero se ha quejado de que Medio Ambiente haga una interpretación "más restrictiva" de la normativa, porque "el espíritu real" de ésta es que no se ocupe más de la mitad de la playa, y "en ningún caso pasamos del 30 por ciento".
Ha recordado que los restaurantes ubicados en la playa ya sufrieron una reestructuración "de manera dramática" en 1988, que supuso la eliminación de la mitad de las instalaciones, por lo que los chiringuitos actuales ya se ajustaron entonces a la normativa.
El colectivo reclama que se estudie "municipio por municipio" la situación de los chiringuitos para facilitar que se ajusten a la ley y puedan renovarse las concesiones que están caducadas.
En cuanto a la ubicación de estos establecimientos, ha apuntado que en otros destinos turísticos están "en la playa", por lo que lo contrario supondría una desventaja competitiva para Andalucía.
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