Nuevas musas

Las teorías de la moda actual ya lo dicen: el estilo lo es todo. No hay nada como tener un estilo propio muy definido como para que todo aquello que te pongas luzca diferente en ti. Una fuerte personalidad, unos rasgos característicos bien marcados y unas claras señas de identidad te pueden convertir en una musa de estilo... o en un bicho raro, según quién te mire. En las últimas semanas se ha hecho bastante popular una mujer que tiene todos los visos de convertirse en icono; se llama Amber Rose y es la estrafalaria novia de Kanye West, con quien conforma una colorida y desacomplejada pareja.

Esta modelo ha terminado de acallar los rumores de homosexualidad que siempre han rodeado a Kanye West. La nueva novia del rapero es toda una mujer, pura exhuberancia femenina, pero no son sus curvas lo único que llama la atención. Además de su poderoso trasero, es su cabeza rapada al uno con el pelo decolorado, sus sempiternas gafas de sol de pantalla y su manera de vestir entre lo futurista y el auténtico stripper style. Sí, y es que Amber, además de maniquí, también ha bailado en alguna barra, y como vemos no tiene ningún problema en posar con bastante poca ropa. También ha aparecido en vídeos musicales y se dice de ella que es íntima amiga de Rihanna, pero últimamente se ha convertido en toda una celebridad que no se despega de Kanye West.

Con él se ha paseado por la Paris Fashion Week, luciendo modelazos como este Alexander Wang en desfiles y fiestas. Un vestido como éste último no tendría nada de especial en otra persona que no sea Amber, que sabe llevar su autenticidad sin ese aire impostado que tienen otras muchas como su propia amiga Rihanna. Ella luce tan natural su pelo rapado y sus leggings fucsias bicolor aunque a algunos les pueda parecer una hortera de bolera.

Incluso con looks más normales como unos pitillos grises y un body blanco o un ’sencillo’ mono negro esta mujer es todo un espectáculo. Ella lleva su estilo hasta para ponerse cómoda y deportiva: micro shorts vaqueros, top blanco, bolso de diseñador y sandalias shoe porn total. ¿Realmente será producto del trabajo de un estilista? Hay que tener mucho aplomo y mucha personalidad para aguantar unos estilismos así, y aunque encuentres un tuturial sobre cómo vestir como ella, lo que emana Amber es absolutamente inimitable. De hecho, intenta emularla: es casi imposible vestir como ella sin parecer ridícula.

Amber Rose recuerda mucho a personajes muy peculiares como Anna Piaggi y Vivienne Westwood, auténticos mitos de la moda y siembre con un estilo tan libérrimo como original. Junto con esta nueva adquisición que nos ha traído Kanye West, hay otras dos musas recientes que también podrían encajar en estos parámetros, aunque salvando las distancias porque el caso de Amber es muy especial.

Una de ellas es Lady Gaga, una niña bien neoyorquina derivada en diva musical gay con ínfulas de moderna. Sus señas de identidad están claras: en las fotos promocionales, maquillaje de fantasía, y en casi todas sus actuaciones y resto de apariciones públicas, lazos, melena con flequillo decolorada, gafas inmensas y un maillot como de danza. Lo de que siempre parezca que va en ropa interior es una característica casi exclusiva suya, aunque a veces sorprende cubriéndose un poco con pantalones. En lo que parece su tiempo libre Lady Gaga tampoco renuncia a su estilo sexy futurista, incluso en sus momentos más elegantes. En las grandes galas también se atreve con todo por muy marciano que nos pueda parecer al común de los mortales. ¡Ah! Además es amiga de la infancia de Paris Hilton, el mejor accesorio que se puede llevar en la vida.

Otra que también traslada su personalidad a cada rincón de su estilismo es MIA, que incluso embarazadísima no abandonó su pasión por los brillos, los estampados y los colores. Si a ella siempre le ha chiflado la lycra, ¿por qué no ponérsela también durante su preñez? Su look de rapera-neoravera fan del flúor y de las maxigafas cautivó con su encanto recargado a Marc Jacobs, que la eligió hace unas temporadas para protagonizar su campaña masculina, nada menos. Los modelazos de MIA a veces pueden rozar el ridículo, pero reconozcamos que en cualquier otra persona sería mucho peor. Si no, que se lo digan a esta MIA wannabe que parece que va disfrazada más que otra cosa.

Y es que, ser estrafalario y natural no es cosa fácil, ¿verdad Christina? Se corre el riesgo de parecer una mala copia barata.

* Ana Serrano es nuestra colaboradora de moda y belleza.