De aquí han salido 126 personas vivas ¿Cómo es posible?

Después de ver cómo ha quedado el avión que se estrelló esta mañana en las inmediaciones del aeropuerto de Amsterdam, nadie se explica cómo han podido sobrevivir la mayor parte de los pasajeros. Tan sólo nueve de las 135 personas que viajaban en la aeronave, han perdido la vida. Hace un mes, un piloto de US Airways se convertía en héroe nacional al salvar la vida a las 155 personas que viajaban en su avión realizando un amerizaje perfecto en el río Hudson, en Nueva York. ¿Milagro, pericia o avances técnicos? Para los expertos, la ausencia de incendios tenido mucho que ver.

En una entrevista en la CNN, Kieran Daly, del servicio de noticias de aviación Air Transport Intelligence, sostiene que esto se debe a las mejoras en la seguridad de los aviones que, en los últimos años, se han centrado mucho en la prevención de incendios y la implementación de materiales ignífugos. De hecho, según él, las llamas han sido las causantes de muchas de las muertes que se produjeron en accidentes anteriores y, en este caso, "la ausencia de fuego" explicaría los altos índices de supervivencia.

Daly recuerda que, en los ochenta, se aprobaron un gran número de leyes que obligaron a las compañías a introducir elementos para prevenir los incendios en las aeronaves, sobre todo en Estados Unidos, aunque las últimas recomendaciones al respecto son más recientes. En 1999, un año después de que tuviera lugar el trágico accidente de Swissair en el Reino Unido, en el que murieron casi 230 personas, y cuya causa fue un incendio a bordo, el Transportation Safety Board de Canada difundió dos recomendaciones dirigidas al uso de materiales para el aislamiento térmico y acústico y a los criterios a seguir en las pruebas de combustibilidad.

Siguiendo este tipo de criterios, muchos fabricantes comenzaron a utilizar "materiales de fibra de carbono recubiertas con resina", según explica un ingeniero aeronáutico consultado por soitu.es. El Boeing 737 de Turkish Airlines que se accidentó esta mañana fue construido en 2003, por lo que muy probablemente se hubieran incluido las mejoras recomendadas en su construcción. Sin embargo, los equipajes, la ropa de los pasajeros y, por supuesto, las grandes cantidades de combustible que transportan los aviones, siguen representando un peligro.

De hecho, la prensa holandesa está empezando a sugerir que el avión se quedó sin combustible, por lo que se apagaron los motores. Su teoría se sustentaría en el hecho de que el avión había perdido mucha velocidad cuando toco tierra y en que no se incendiara después del golpe.

Otras causas (como la suerte) han influido

Sin embargo, este ingeniero cuestiona que los incendios que se producen antes o después de los accidentes aéreos sean los principales causantes de las víctimas mortales. En su opinión, en un siniestro de este calibre, la mayor parte de las muertes se producen por el impacto y no por las llamas.

Precisamente, esto es lo llamativo del accidente de esta mañana. La aeronave quedó destrozada y se partió en tres trozos tras el aterrizaje forzoso que acabó en accidente. Tanto es así que, según testigos presenciales, muchos de los supervivientes salieron por las propias grietas que se hicieron en el fuselaje, en vez de por la puerta. "El 737 es un avión muy robusto", aseguraba Philip Butterworth-Hayes, director de la asociación de expertos Air Traffic Management Insight, por lo que no se dispersaron demasiados trozos de fuselaje por la zona del impacto.

"Los aviones están preparados para aguantar mucha fuerza", afirma el ingeniero consultado, experto en estructuras. En su opinión, el bajo número de fallecidos se debe más bien a la pericia del piloto o, simplemente, a una cuestión de "suerte".