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El Tau retoma el trono en Madrid

EFE
Actualizado 23-02-2009 01:36 CET

Madrid.-  El Tau Vitoria empaquetó la Copa 2009 con destino a las vitrinas del Buesa Arena tras 45 minutos decantados de su lado gracias a una bandeja del estadounidense Pete Mickeal que remató una excelente final con el Unicaja (98-100) en el tiempo añadido entre dos excelentes equipos, con excelentes jugadores, en un excelente escenario y con unas excelentes aficiones.

Sobresaliente 'cum laude' para los alaveses, cuyo último éxito copero se remonta a la fase final de 2006, también disputada en Madrid. Sobresaliente alto para el Unicaja, al que sólo separó del título la canasta del norteamericano. El bosnio Mirza Teletovic, autor de veinte puntos, recibió el galardón para el Jugador Más Valioso (MVP). En valoración firmó diez puntos y, aunque el irlandés del cuadro malagueño Robert Archibald le triplicó en nota (treinta puntos), los vascos acapararon todos los honores.

El internacional español del Barcelona Juan Carlos Navarro y el también internacional del Tau, aunque por Brasil, Tiago Splitter, acapararon los focos de las dos primeras eliminatorias de cuartos de final con dos brillantes actuaciones que resultaron definitivas para la clasificación de sus respectivos equipos para la primera semifinal.

Navarro se marcó un partido de lujo frente al Real Madrid. Y no sólo por los veintiocho puntos que demolieron a los blancos y situaron el balance de enfrentamientos entre ambos equipos dentro de la Copa ACB en 12-2. La casi treintena de puntos del escolta azulgrana, que obtuvo veintisiete puntos de valoración, vino acompañada de diez asistencias.

El 75-83 que selló el triunfo barcelonista contó con los veintiocho tantos de Navarro distribuidos en un cuatro de siete de dos, un seis de ocho en triples, un dos de tres desde la línea de personal y una recuperación.

Splitter esperó hasta el segundo cuarto para entrar en acción, pero lo hizo de forma demoledora. Salió en el quinteto inicial del Tau y a los cinco minutos, con un cero de uno de uno, se retiró al banquillo para regresar al filo de la bocina final del cuarto.

Cuando el descanso interrumpió la eliminatoria, Splitter ya sumaba diez puntos, cinco rebotes y catorce de valoración. El pívot baskonista añadió otros diez tantos a su cuenta en la segunda parte como eje fundamental de la tremenda batalla que el Tau tuvo que librar para deshacerse del Pamesa, que en los tres últimos minutos concedió un marcador engañoso (82-66).

Splitter firmó cinco de trece de dos, diez de quince tiros libres, diez rebotes (cinco ofensivos), una recuperación, dos tapones y once faltas recibidas.

La Copa resulta territorio abonado para las sorpresas, además, lo habitual es que salten sin ir más allá de la primera ronda y, en esta edición, sólo cabía ya una posibilidad de cumplir con la tradición de lo inesperado cuando el MMT Estudiantes y el DKV Joventut dieron el pistoletazo al último cruce de la fase inicial.

El cuadro madrileño la materializó con esfuerzo y nervios templados en un minuto final de infarto (80-75). El esloveno Samo Udrih lideró a los colegiales con veintitrés puntos (cuatro de seis de dos, tres de cinco de tres, seis de seis tiros libres, seis rebotes y dos asistencias).

El escolta consiguió veinticuatro puntos de valoración y fue el único que superó el rendimiento de Ricky Rubio (dieciséis tantos con siete de diez dobles, cero de cuatro triples, dos de dos libres, tres rebotes, seis recuperaciones y siete asistencias).

La resolución de la eliminatoria, en un último minuto apasionante, la dieron Udrih, el estadounidense Corey Brewer (dieciséis) y el checo Martin Rancik, que puso la guinda con un par de aciertos desde la línea de personal (80-75). La Copa ya tenía su sorpresa.

Algo con lo que el Kalise Gran Canaria ha soñado en cuatro de las últimas cinco ediciones coperas y que el estadounidense Marcus Haislip, a la par que una acertada defensa del Unicaja sobre el lanzador de los grancanarios, el canadiense Alex English, al que maniató durante todo el primer tiempo, impidieron de nuevo.

Haislip rompió el choque desde la distancia (cuatro de cinco triples) y abrió la vía hasta el 79-69 que hundió la nave insular en la tanda de partidos de la salida. El norteamericano lo hizo bonito, oportuno y vistoso (tres de ocho de dos, cuatro de seis libres cinco rebotes y una asistencia). En la discreción se movió el checo Jiri Welsch (doce tantos y veinte de valoración).

El Tau Vitoria tiró de las bondades del máximo anotador de la Liga, el serbio Igor Rakocevic, para propinar un castigo inesperado al Barcelona en la primera semifinal (77-90), y el Unicaja, en un partido sin rastros de holgura, recurrió a Haislip para someter a un anfitrión, el Estudiantes, que le apretó la nuez hasta la gresca de los minutos finales (71-78).

Rakocevic abatió al Barcelona en una sinfonía del Tau. El serbio dirigió la orquesta baskonista como el maestro israelí Daniel Barenboim, armonizador de hebreos y palestinos al son de obras maestras, a través de hipnotizadores sonidos (veintisiete puntos producto de un cinco de siete de dos, un cuatro de diez de tres, un cinco de cinco en la línea de personal, tres rebotes, dos asistencias y cinco faltas forzadas en 32.22 minutos).

El Unicaja tuvo que esperar hasta el ecuador del tercer cuarto para rescatar a Haislip de la implacable defensa que el checo Martin Rancik le opuso hasta empezar a relamerse por el instinto aniquilador del alero.

Corey Brewer anotó diez de los doce puntos del Estudiantes en el tercer cuarto. Iturbe brilló en el perímetro con seis triples en diez disparos, pero Haislip (quince puntos; cuatro de cinco de dos, uno de dos de tres, cuatro de cuatro en tiros libres, dos rebotes, una recuperación y una asistencia) resurgió de la nada para meter al Unicaja en el choque por el título.

El Tau Vitoria y el Unicaja se han merecido el billete para una una final inédita. Mickeal remachó el sexto título copero para los alaveses en el nieve finales. Aíto, el técnico más laureado en los veintiséis años de la Copa ACB, volvió a tocar el trofeo con las yemas de los dedos. El Unicaja perdió igual que pudo haber ganado. El Tau es campeón igual que pudo haber perdido. Copa ACB.

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