San Sebastián.- El Bruesa GBC toma aire tras una victoria amplia y merecida ante un Iurbentia Bilbao que sólo ha aguantado el primer cuarto, y que ha sucumbido luego en el segundo por 18 puntos gracias al acierto en triples de los locales, lo que le ha impedido luchar por el triunfo.
Al Iurbentia le ha pasado también factura el esfuerzo entre semana en la Eurocup en su visita al Charleroi porque después de los primeros diez minutos el equipo ha parecido roto, desfondado, jugando a un ritmo cansino ante un Bruesa dinámico y con mucha chispa.
Los casi diez mil espectadores que se han dado cita en la plaza de toros de Illumbe han disfrutado de lo lindo con el excelente nivel que ha ofrecido el conjunto guipuzcoano, inesperado por otra parte después de seis derrotas consecutivas que amenazaba, de haber tenido continuidad, con generar una crisis profunda en el seno del club.
Los jugadores de Pablo Laso parecían haberse reservado en las semanas previas para este derbi vasco porque todo aquello que no les había entrado antes encontró hoy el camino a la cesta, para desesperación de un Txus Vidorreta que no sabía cómo frenar el vendaval de juego y anotación de los locales.
Ha empezado, no obstante, muy mal el partido para Bruesa porque inicialmente el equipo vizcaíno ha funcionado mejor, ha defendido con acierto y se ha adjudicado el primer parcial por 20-23, para entrar luego en barrena y desaparecer del partido.
Un demoledor porcentaje en triples de Bruesa, 10 de 15 al descanso, un 72% en tiros de dos puntos, y un gran trabajo de sus hombres altos ha determinado que el choque estuviera decidido para el descanso, gracias entre otros factores a que Panko y Roe se han convertido en dominadores del rebote defensivo, impidiendo segundas jugadas que pudieran producirse tras el hoy errático tiro exterior visitante.
No han cambiado las cosas a la salida de vestuarios porque Iurbentia estaba para pocos trotes y un acercamiento a 11 puntos (74-63) ha sido el momento de mayor nerviosismo en una grada que temía pudieran volver a reproducirse viejos vicios de su equipo.
El Bruesa, finalmente, ha vuelto a pisar el acelerador en los últimos minutos para romper con facilidad la presión visitante a saque de canasta, encontrando a Hopkins y al base Ricardo Uriz como argumentos más convincentes.
En los minutos postreros los guipuzcoanos se han gustado a sí mismo, han levantado en varias ocasiones a sus seguidores de los asientos y Pablo Laso se ha permitido el lujo de hacer disfrutar de la fiesta a Edgar San Epifanio, hijo del mítico Epi, para que recibiera el cálido aplauso de la grada tras salir de una lesión de varios meses.
Ficha técnica:
87.- Bruesa GBC: Popovic (12) Hopkins (13), Panko (12), Isaac López (6), Doblas (9)- quinteto inicial- Uriz (5), Sergio Sánchez (11), Urtasun (2), Roe (15), Andrade (2), Marconato (0), San Epifanio (0).
73.- Iurbentia Bilbao: Pasalic (7), Seibutis (13), Quincy Lewis (2), Banic (11), Blums (18)- quinteto inicial- Recker (2), Javi Salgado (9), Markota (3), Guardia (3), Paco Vázquez (0), Savovic (5).
Arbitros: Redondo, Francisco J. Araña, Carlos Cortés. No han descalificado a ningún jugador.
Marcadores parciales por cuartos: 20-23; 50-35; 66-50; 87-73.
Incidencias: 10.000 espectadores en la plaza de toros de Illumbe.
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