Washington.- El Ford's Theatre de Washington, donde fue asesinado el presidente Abraham Lincoln en 1865, reabrió hoy sus puertas tras 18 meses de trabajos de reforma para celebrar el 200 aniversario del nacimiento del mandatario estadounidense.
Esta es la primera renovación que se ha hecho desde que en 1968 volvió a funcionar como teatro, tras un siglo de abandono en el que, mientras cambiaba de propietarios, se fue deteriorando.
El secretario del Interior, Ken Salazar, el director del teatro, Paul Tetreault, y el alcalde de Washington, Adrian Fenty, junto con algunos de los patrocinadores privados que han contribuido a la reforma, celebraron hoy poder mantener vivo el espíritu de Lincoln.
Para Tetreault, el teatro es "un lugar que recuerda la muerte de Abraham Lincoln, pero también celebra la vida y su enorme legado", dijo.
Parte de ese legado ha sido evocado por el presidente, Barack Obama, para quien Lincon es un modelo a seguir, según el secretario de Interior.
"Barack Obama ha estudiado su vida y su legado, y le respeta por su sabiduría", dijo Salazar, quien recordó que juró su cargo con la biblia que perteneció a Lincoln.
"Al igual que Lincoln, el presidente Obama se enfrenta a los desafíos de la guerra y las dificultades económicas", dijo Salazar, "pero también ha hecho una llamada a la unidad, como hizo Lincoln en el siglo XIX, y al cambio", agregó.
Después de 18 meses de trabajo y un coste de 25 millones de dólares, el teatro mantiene su apariencia decimonónica pero las incómodas sillas de madera han sido sustituidas por butacas del estilo de la época, el techo ha sido reformado y las lámparas y las molduras de escayola lucen como el primer día.
El escenario ha sido reconstruido para ampliar su capacidad, así como el patio de butacas, donde hay 658 nuevos asientos.
No obstante, todos los elementos históricos se han mantenido y se han incluido calefacción, aire acondicionado y ascensores para las personas discapacitadas.
Destaca en particular el nuevo vestíbulo, espacioso y luminoso, en el que se muestra en una vitrina la capa que llevaba Lincoln la noche del 14 de abril de 1865.
Aquella fatídica noche, recibió un disparo del actor John Wilkes Booth mientras asistía con su esposa Mary al tercer acto de la comedia "Our American Cousin", en un magnicidio que tiñó de luto a la nación.
En su bicentenario, Lincoln es recordado como el artífice de una nación construida sobre la base de que "todos los hombres son creados iguales".
La Ford's Theatre Society ha trabajado desde su constitución en 1968 por mantener vivo el legado de Lincoln, mostrando no sólo el lugar en el que murió, sino sus ideales y el impacto que han tenido en la historia estadounidense.
El proyecto de renovación también incluye al museo ubicado junto al teatro, que reabrirá en primavera, y la Casa de Petersen, que alberga la cama de la muerte de Lincoln y que está situada justo enfrente.
Para conmemorar el bicentenario de Lincoln el teatro ha organizado una jornada de puertas abiertas con actores vestidos de época que además de mostrar los entresijos del edificio representarán algunas escenas de la vida de Lincoln.
A los actos de la reapertura se suma la entrega de la medalla de Lincoln que anualmente concede esta organización y recibirán esta noche el director de cine George Lucas y el actor Sidney Poitier, en reconocimiento a su trayectoria artística.
Durante estos días el teatro ofrecerá la obra "The Heavens Are Hung in Black", basada en la vida de Lincoln y protagonizada por David Selby.
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