Madrid.- El secretario de Estado del Vaticano, cardenal Tarsicio Bertone, que finaliza hoy su estancia en Madrid, ha reivindicado el papel de la familia, basada en el matrimonio entre un hombre y una mujer, como escuela de humanidad y lugar primario en la educación de la persona.
Bertone, que ayer aprovechó su segundo día de estancia en Madrid para mantener diversos encuentros de carácter político e institucional, pronunció hoy una conferencia sobre "Los Derechos Humanos en el Magisterio de Benedicto XVI" en la sede de la Conferencia Episcopal Española (CEE), con motivo de la conmemoración del LX Aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos".
Durante el acto, al que asistieron junto a los obispos españoles los Duques de Calabria y personalidades del mundo de la política, la cultura y directores de Medios de Comunicación, Bertone ha defendido la dignidad y la vida del ser humano "desde su concepción hasta su ocaso natural".
El cardenal ha negado "injerencia indebida" de la Iglesia en la actividad legislativa, "propia y exclusiva del Estado", cuando aquella se pronuncia sobre problemas morales, y ha afirmado que la Justicia sólo puede alcanzarse con un previo respeto a los Derechos Humanos y a la dignidad natural de cada persona "con independencia de la fase de su vida en que se encuentre".
Bertone ha reiterado que la vida familiar está fundada sobre "el matrimonio de un hombre y una mujer, unidos por un vínculo indisoluble, libremente contraído", y ha indicado que la familia "es la verdadera escuela de humanidad y de valores perennes, lugar primario en la educación de la persona".
El número dos del Vaticano, que fue presentado por el presidente de la CEE, cardenal Antonio María Rouco, ha repasado la Declaración Universal de los Derechos Humanos, citando a Juan Pablo II y a Benedicto XVI, y se ha referido a la libertad religiosa como derecho "primario e inalienable", y condición "primera e indispensable" para la paz.
"Querer imponer, como pretende el laicismo, una fe o una religiosidad estrictamente privada es buscar una caricatura de lo que es el hecho religioso", ha subrayado, para agregar que "el Estado no puede impedir la práctica pública de la religión.
Asimismo ha puntualizado que el Estado democrático ha de reconocer la libertad religiosa y crear las condiciones para su efectivo y pleno ejercicio y ser "absolutamente neutral" respecto a todas las confesiones, y ha explicado que esta igualdad no significa "uniformidad", pues hay que tener en cuenta sus peculiaridades y arraigo cultural e histórico.
Tras indicar que los derechos humanos son "verdaderamente supranacionales" pues están "por encima de la política y también por encima del Estado-nación", ha recalcado que "ninguna minoría ni mayoría política" puede cambiarlos.
Tras la conferencia, y antes de trasladarse a la Nunciatura Apostólica para asistir a un almuerzo de despedida ofrecido por la Conferencia Episcopal y la Nunciatura con los obispos españoles, Bertone mantuvo un breve encuentro con los medios informativos en la sala de prensa de la sede de la CEE.
En respuesta a los periodistas, Tarcisio Bertone ha dicho que en los encuentros mantenidos con las autoridades españolas y, en relación con la futura legislación sobre el aborto, ha insistido en que "si algo es necesario, es restringir, y no ampliar" la posibilidad de abortar.
Reconoció también que las conversaciones con el Gobierno español han sido "provechosas para todas las partes: Santa Sede, Iglesia en España y Estado español".
Asimismo, matizó que su conferencia ha estado planteada "desde una visión general y fundamental" de cómo "han sido contemplados por la Iglesia esos derechos humanos, y no sólo desde el punto de la Declaración Universal, sino de su aplicación".
En la respuesta a un periodista sobre si la conferencia aludía concretamente a la situación española, el número dos del Vaticano precisó que "en este cuadro general se pueden encontrar puntos particulares presentes hoy en el debate público, tanto en España como en cualquier parte del mundo".
"Pero, ha recalcado, la respuesta concreta a los problemas en España los hemos planteado y discutido ayer (en los encuentros políticos), no hoy".
El secretario de Estado explicó, asimismo, que tiene la percepción de que "el Ejecutivo no prepara una equiparación de todas las religiones y confesiones religiosas del mismo modo".
Y "me han asegurado -ha dicho- que en la nueva ley de libertad religiosa, el planteamiento legal va a tener en cuenta el criterio del arraigo de las religiones y los conceptos de presencia cultural y artística, y además, precisó, se tendrán en cuenta los Acuerdos Iglesia-Estado".
En relación con la reforma de la ley de interrupción del embarazo en España, Bertone ha indicado que "sobre el aborto, evidentemente estamos en posiciones distintas, y ahí he intentado comprender y hacer comprender que si algo es necesario, es restringir y no ampliar la posibilidad de los abortos", concluyó.
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