Los españoles hemos ganado una media de dos o tres kilos después de estas deliciosas fiestas: turroncitos, corderazos, cenas de empresa regadas con mucho más alcohol del que solemos tolerar habitualmente… Claro, ahora vienen las lamentaciones y las dietas relámpago para perder todo lo que se pueda en un tiempo récord. Bien, pues para que tu angustia y tu ausencia de dulces y chucherías se haga más llevadera, el mundo de los accesorios nos propone una bonita forma de no renunciar a ellos y sin ganar un gramo de peso: las joyas con forma de comida. Hasta que vuelvas a tu peso deseado, que los únicos caprichos 'engordantes' sean los que cuelguen de tu cuello o adornen tus orejas. ¡Y que no sean comestibles!
Vale, no es lo mismo que la comida de verdad y no te llenará el estómago, pero te recordará lo que algún día podrás volver a comer, en cuanto te quites esos kilejos de encima. El mundo de la joyería se vuelca con todos aquellos que están haciendo una dieta desintoxicante de emergencia y que echan de menos los dulces y las comidas ultracalóricas. Con estos accesorios alimenticios no llenas tu estómago, pero sí tu look y tu espíritu.
Comenzamos el menú en una tienda con sede en Barcelona pero que vende online, Duduá, que te sonará de aquella vez que te descubrimos el sorprendente mundo del amigurumi. En ella tienen una selección de firmas artesanales que fabrican cosas como este cheeseburger de ganchillo decorativo de la marca Crochettes Barcelona. Esta marca, de hecho tiene un interesante catálogo alimenticio tejido con el que no ingerirás ni una sola caloría.
Continuamos en la boutique online Shanalogic con sus magníficas pulseras de sushi, todo un homenaje a la comida japonesa que cuesta 60 euros. En su web encontrarás todo un suculento menú con precios que parten de los siete dólares y piezas tan alimenticias como el queso gouda.
Bettie and Earl es una marca de joyería artesanal que nos propone el desayuno de los campeones pero en forma de pendiente: bacon y huevos. Es de plástico y sólo cuesta ocho dólares. Para acompañar, en Fred Flare hemos dado con el accesorio perfecto: una cartera-tostada con mantequilla por sólo 15 dólares.
Hay otra marca, Cherry Dot, que tiene infinidad de joyas de aspecto alimenticio, aunque nos quedamos con sus pendientes sándwich para una rica merienda de 14.99 dólares.
Para un menú más elaborado a base de pizza, comida china o incluso todas las frutas que puedas imaginar, pásate por Bugga Bugs, donde realizan todos los alimentos que puedas imaginar a base de fieltro. También tienen el kit completo para tomar el té, con loza incluida.
¿Vas al cine? Bien, entonces llévate el colgante palomita de Tatty Devine, que cuesta 21 libras pero que no aporta una gota de grasa.
El hombre ha llegado a la luna, pero aún no ha inventado la bollería apetecible y baja en calorías. Aquí tienes los postres más ricos, al menos visualmente, aptos incluso para celíacos. En Dududá también venden actualmente una serie de joyas en fieltro con forma de pastelitos. También los puedes adquirir a través de Etsy, ese directorio de piezas handmade, desde 12 euros.
En esta tienda de accesorios 'do it yourself' te proponemos dos objetos. El primero es uno de sus pequeños colgantes-helado de sólo 0.80 libras, y el segundo un collar de gominolas de ositos por cuatro. Para endulzar tu vida sin que se te piquen los dientes.
El mundo de los postres de cuchara también tiene su representación 'joyística'; empezamos con un suculento flan, con nata y guinda, que la marca Mini Mania vende por nueve dólares. MatildaMatilda tiene desde la temporada pasada un collar-tarta de frutas por 25.90. Pasteles, galletas y dulceríos varios en fimo y desde nueve dólares en Skooky Spry Creations.
Una firma más que también tiene tienda en Etsy: The Lovely Teaspoon, que basa casi todo su catálogo en la alimentación. Nuestro preferido, este divertido anillo-tostadas que cuesta sólo cinco dólares.
Pero no sólo las pequeñas firmas independientes y artesanas se inspiran en la comida para sus creaciones. La misma Juicy Couture, una de las preferidas de Paris Hilton, también nos ofrece un par de caprichos no calóricos pero muy dulces. El primero es un colgante con forma de helado que vale 48 dólares. El segundo, unos pendientes magdalena de 78.
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