Ourense.- La Fundación San Rosendo propietaria de 59 centros asistenciales y residenciales para personas dependientes en toda Galicia afronta la actual crisis económica con la construcción de nuevos centros, al igual que hicieron en la "crisis de 1993", según recordó hoy el presidente de la entidad, Benigno Moure.
Moure explicó hoy en rueda de prensa, acompañado por otros "patronos" de la fundación, que el presupuesto para 2009 que es de 42,75 millones de euros, algo superior al del año anterior, según dijo.
En relación a los proyectos en marcha, explicó que el 19 de enero se pondrá en marcha la residencia "Estella Maris" de Patos (Nigrán), al lado del mar.
La apertura estaba prevista para septiembre de 2008 aunque fu "imposible", ya que hubo "muchas dificultades" debido a que está en un terreno pantanoso y también hubo retrasos por problemas con Patrimonio porque apareció alfarería prehistórica", subrayó.
En el mismo mes de enero de 2009 comenzará la construcción de otra residencia en Forcarei en la provincia de Pontevedra y para marzo prevé el comienzo de otra en Baralla, provincia de Lugo para las que ya tiene licencia y empresas constructoras en concurso.
En la provincia de Ourense, la fundación abordará dos nuevos proyectos que serán un centro para minusválidos en Mourillós (Celanova) y el que calificó como "sueño" de la entidad, que es la construcción de un balneario para estancias de un mes de personas dependientes en un monte de Laias (Cenlle).
Ambos casos están pendientes de informes de la dirección general de Patrimonio de la Xunta, ya que en Mourillós, la residencia estará en un edificio catalogado y en Laias, las catas descubrieron restos prehistóricos y romanos "como ocurre en toda esa zona próxima al río Miño", agregó.
Moure se centró en el futuro balneario para personas dependientes para señalar que su construcción llevará un año y medio desde el momento en que cuente con la autorización de Patrimonio y para ello ya tienen los 42.000 metros cuadrados que precisa.
Aludió a los presupuestos para 2009 para calificarlos de ajustados a la realidad "y no incluyen la previsión de ingresos procedentes de la Ley de Dependencia, como hicimos el año pasado, porque luego nunca llegaron", agregó.
Se refirió a la crisis económica para señalar que afecta a la fundación "como a todo el mundo" pero la afrontan con la construcción de los cinco nuevos centros en toda Galicia "como hicimos también en la crisis de 1993".
Sobre la incidencia de esta crisis dijo que en 2008 las familias optaron por ingresar a sus mayores en residencias de la fundación "cuando ya estaban muy deteriorados por lo que tuvimos más fallecimientos que en otros años" y también que los números fueron peores en la comarca de Valdeorras porque cada municipio tiene ahora una residencia.
Moure dijo que en los 59 centros residenciales -la mayor parte de ellos en Ourense-, 1.500 trabajadores atienden a 3.350 personas internadas de las que 3.000 se acogen a la Ley de Dependencia "pero no tenemos constancia de que diesen dinero a nadie todavía".
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